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Un siglo con la Aviación Naval

Una exposición en el Museo Elder muestra la evolución del cuerpo aeronaval español desde su fundación en 1917 hasta la actualidad

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Exposición '100 años de aviación naval' en el Museo Elder de las Ciencias

Cien años dan para mucha historia. El 15 de septiembre de 1917 el rey Alfonso XIII daba por inaugurada la Aviación Naval en España. Solo habían pasado catorce años desde que los hermanos Wright realizaron el primer vuelo con motor en la historia en Carolina del Norte. Por tanto, los comienzos del cuerpo militar fueron duros, enmarcados en una tecnología rudimentaria.

El Museo Elder acoge en sus instalaciones una exposición gratuita que refleja la transformación que ha sufrido la aviación de la Armada desde sus orígenes hasta la actualidad. Una muestra en la que el espectador podrá ver hasta el 9 de octubre los enormes progresos en la tecnología militar española.

Durante años la flota estuvo en precario. El capitán de corbeta Pedro María Cardona Prieto fue el primero en recibir la orden de seleccionar el personal y el material pertinente. Aunque en un principio su idea fue crear la Escuela de Aeronáutica en la provincia de Murcia, una serie de inconvenientes le llevaron a situarla en el aeródromo de El Prat, actual aeropuerto internacional de Barcelona.

Fue durante la Guerra de Marruecos cuando este cuerpo del aire sufre una gran evolución. Con el fin de intervenir de una manera más efectiva en el conflicto la Armada reconvirtió un viejo carguero alemán en su primer portaaviones, el Dédalo, en 1922. Una ilustrativa foto de la época muestra las rudimentarias aeronaves sobre su cubierta. Justamente, los conflictos coloniales en el norte de África ocupan un lugar especial en la exposición. Destaca, por ejemplo, una imagen del Dédalo durante el desembarco de Alhucemas el 8 de septiembre de 1925.

El costumbrismo y la vida cotidiana de los marines también están presentes. Momentos entrañables como el posado de un grupo de mecánicos de la aviación en la década de 1920. Otra imagen para el recuerdo son los hidroaviones bombarderos Macchi 24 surcando los cielos.

El autogiro de Juan de la Cierva, precursor del helicóptero tampoco podía faltar en la muestra. Fue durante la II República cuando el Ejército compró dos ejemplares, dada su versatilidad y capacidad de acceso a lugares recónditos.

Al comenzar la Guerra Civil la Aeronáutica Naval contaba con 105 aparatos. Fue después de la contienda cuando este cuerpo queda en el olvido.

En 1954 se produce un punto de inflexión en la historia de la flotilla. En ese año llegaron desde Estados Unidos una serie de helicópteros Bell 47 G, fruto de los acuerdos alcanzados entre la administración norteamericana y España.

De la misma década datan una serie de fotografías referentes a la construcción de la Base de Rota, sede desde entonces y hasta la actualidad de la Aviación Naval. A partir de este momento se observa una mejora continua en las escuadrillas aéreas de la Armada.

En esta evolución destacan fotos tan curiosas como una en la que se puede observar al rey emérito Juan Carlos I junto al expresidente del gobierno Adolfo Suárez y el contralmirante Saturnino Suanzes durante la llegada del Harrier AV 8S.

El portaaviones Príncipe de Asturias ocupa un lugar importante en la exposición. Destacan mucho las fotografías de su envergadura en plena mar. El barco estuvo operativo entre 1988 y 2013, cuando recibió el relevo definitivo del Juan Carlos I.

El día de su despedida protagoniza una de las fotos más evocadoras. En esa ocasión el buque se encontró con el nuevo portaaviones de la Armada, el Juan Carlos I, después de tres años compaginando labores. El nuevo barco, de carácter anfibio, puede acoger una flotilla destacable de aviones en su cubierta.

El espectador no puede irse sin observar las fotografías referentes a las últimas actuaciones del cuerpo aeronaval. Se trata de una serie de imágenes que recuerdan desde el rescate de unos náufragos frente a las costas de Somalia; hasta el trágico accidente de un helicóptero en Haití en 2010, en el cual fallecieron cuatro personas.

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