El Área de Gobierno de Sostenibilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria colabora con la Federación Ecologista Ben Magec (Bejeque) en las jornadas de voluntario que ha impulsado para la erradicación y control, en el cauce del Guiniguada, de la planta Pennisetum setaceum, conocida como 'rabo de gato'.

Esta planta es una especie invasora que está presente de manera abundante en muchos lugares, sobre todo cunetas y terrenos abandonados de Canarias, y que se ha convertido en un motivo de preocupación por su extensión y porque impide la presencia de otras especies endémicas.

El método empleado para la eliminación garantiza que las semillas de la planta no se extienden, rodeándolas de una bolsa de plástico y descomponiendo las semillas dentro de un bidón con agua durante meses, para anular su germinación.

El objetivo es que estas jornadas, que este fin de semana permitirán actuar en el Barranco Guiniguada, se celebren periódicamente. La iniciativa se inició ya ayer, con una charla informativa por parte del colectivo Abeque en el Café d'Espacio.

Durante este sábado, un grupo de voluntarios han salido desde el Centro de Recursos Ambientales El Pambaso para realizar la actividad de control de rabo de gato en el Barranco del Guiniguada. Posteriormente, participaron en una actividad lúdica dinamizada por Tagenza (música canaria y juegos canarios).

En total, unas 50 personas voluntarias participaron activamente en esta actividad, según indicaron desde el Ayuntamiento. Además de los voluntarios de Bejeque, participó también el personal del Servicio de Limpieza y de la Unidad Técnica de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.

"El Ayuntamiento aporta materiales como guantes, útiles para el desbroce, bolsas, sacos, bidones y plantones de vinagrera para la repoblación", destaca la concejala de Sostenibilidad, Pilar Álvarez, que señaló que también se ha cedido el uso del Centro de Recursos Ambientales del Pambaso con fines educativos y medioambientales, "como inicio de un amplio programa de actividades que se anunciará próximamente",

Álvarez valoró la iniciativa de Bejeque-Ben Magec, subrayando que "estas actividades comunitarias de control y erradicación de especies vegetales invasoras en nuestros ecosistemas contribuyen de manera activa a la concienciación y al cuidado del entorno natural".

"Valoramos muy positivamente la contribución del voluntariado y de los colectivos ecologistas de las islas sobre la alerta y atención de todas las instituciones y población canaria sobre las amenazas que afrontan los espacios naturales debido en este caso, por ejemplo, a la expansión incontrolada del rabo de gato, especie que ha llegado hasta rincones muy recónditos de todas las islas, afectando a las especies endémicas de forma que dificulta su crecimiento. No hay que olvidar que cada especie endémica en el suelo crea las condiciones apropiadas para el mantenimiento hídrico, la vida de la fauna y el valor del paisaje natural como recurso para una mejor calidad de vida, y las especies vegetales invasoras impiden este desarrollo de las especies propias", explicó.