La ciudad está a punto de estrenarse cientos de nuevas bicicletas eléctricas e inteligentes. ¿Podría explicar qué son exactamente estas últimas?
La principal diferencia que tiene una bicicleta inteligente con los sistemas que conocemos en España actualmente es que podrían funcionar sin estación. Es decir, las bicicletas son capaces de hacer el alquiler, la devolución e incluso dejarlas en modo parquin, que es una nueva opción al tener una cadena integrada, gracias al ordenador de a bordo que tienen en la parte de atrás donde hay un pequeño teclado y un pequeño lector. De este modo, el usuario puede escanear el código QR, elegir la bicicleta a través de la aplicación, o ir directamente al lector y pasar su tarjeta, esperemos que la LPA Movilidad. Porque lo que queremos también es integrar transportes y que, por ejemplo, sirva la misma tarjeta tanto para las guaguas como para las bicis.
¿Qué otras características reseñables tienen estas bicis?
En general, el hardware, la estación, la bici en sí tiene una calidad bastante elevada. Nosotros utilizamos los mejores componentes que encontramos en el mercado. Por ejemplo, los neumáticos son de una marca alemana que se llama Schwalbe, y frenos y marchas son de Shimano, ambas marcas que los aficionados al ciclismo conocerán. Y por otro lado, el software, la app, etcétera, serán bastante más potentes ya que en este caso el usuario tendrá un perfil y podrá incluso ver un registro de su uso, consultar datos como las calorías que ha perdido en el trayecto o el dióxido de carbono ha ahorrado a la ciudad.
¿En qué otros países tiene presencia este modelo?
Aquí hemos traído el modelo de 2017 que hemos instalado en Berlín. Allí ganamos el concurso el año pasado de bici pública y lanzamos en mayo 6.000 bicicletas que son exactamente las mismas que las de Las Palmas de Gran Canaria. Estas son las primeras de su estilo en España y en lo que respecta a la ciudad, en nuestra decisión de implantar este modelo ha influido un poco el tema de juntar estaciones entre las que hay una diferencia. Por un lado, están las inteligentes, con un tótem y una pantalla táctil y, por otro, hay otras 35 que son modulares y más pequeñas y que tienen un tótem informativo. Al tener el usuario ya poder del alquiler en su mano, en el móvil, podemos ahorrar un poco la obra civil y hacer estaciones más modulares y fácilmente movibles en caso de que haya cualquier evento en la ciudad de manera que tienen menor impacto en la estructura urbana.
¿Las bicis estarán reforzadas para salvaguardar su mantenimiento de actos vandálicos?
Sí, el ordenador de a bordo que comenté antes tiene GPS integrado, o sea que desde el centro de control se puede llevar una gestión más o menos en directo de toda la flota, con lo que con cualquier bicicleta que no esté activamente alquilada o aparcada inmediatamente saltarán las alarmas y podrán ir a por ellas. Sobre esto tenemos una historia curiosa. En Colonia tenemos un sistema con una generación anterior de bicis inteligentes sin estaciones, y hemos recuperado bicis desde Copenhague e Italia de gente que se las llevó en el furgón pensando que sería gratis, o no sé. Así que el GPS funciona en todo el mundo.
Otro problema habitual es a la hora de hacer la devolución. ¿Habrá novedades al respecto?
La bici inteligente también solventa este problema porque tiene un candado integrado y este solamente se abre y se cierra con el ordenador de a bordo, por lo que no hay más interferencias porque cuando el usuario llega a la estación, en el fondo, no hay más comunicación que la online entre bici, la app y centro de control.
Aquí también habrá bicicletas para personas con movilidad reducida. ¿ Cómo será el servicio de préstamo en este caso?
En principio esta pregunta sería un poco más para Sagulpa, que al final son los que van a gestionar el sistema. Yo simplemente hablo como proveedor de las bicis y en este sentido nosotros hemos provisto a la ciudad de las mejores bicis PMR que hemos podido encontrar en el mercado. También tengo que decir que no estamos muy acostumbrados a introducir bicicletas de este tipo por el hecho de que el sistema es un sistema de alquiler de bici pública. Pero tenemos como valor de empresa la accesibilidad, es decir, que todas las personas tengan la movilidad que tengan puedan acceder a todos los servicios, entonces es un experimento muy interesante también para nosotros porque es la primera vez que realmente vamos a introducir unas bicicletas PMR, con lo cual en esto Sagulpa ha sido bastante vanguardista.
¿Cuáles son las tendencias actuales en Europa en tema de bicicletas públicas?
Pues hay un boom actualmente de bici pública increíble. Hace unos pocos años era un modelo muy definido, una estación, una serie de bicis e ibas de A a B. Ahora puedes hacer parquin entre medias, aparcar la bicicleta, hay bicis inteligentes, bicis eléctricas.... Hay un movimiento ahora mismo bastante fuerte que llega desde Oriente desde zonas como China, Singapur, Japón, con empresas que han tomado una idea de la cual nosotros nos jactamos de haber sido los primeros, al menos con bicis inteligentes, y ellos la han simplificado aún más. Son empresas que se dedican a construir unas bicis muy baratas y dejarlas suelta por la calle en cualquier sitio ya que están subvencionadas por grandes plataformas de capital riesgo que lo que quieren es hacer una app y recolectar datos. Así que estamos asistiendo en Europa a una entrada masiva de bicicletas que no necesitan estaciones pero que están financiada por grandes corporaciones que son capaces de meter bicicletas a miles. En algunas ocasiones generando situaciones en las que algunas bicicletas son lanzadas a ríos o en un intercambiador no hay más espacio y se acumulan en montañas.
