Los tres carriles para la circulación de vehículos se reducirán a sólo dos en la calle Rafael Cabrera de la capital grancanaria cuando entre en escena la MetroGuagua, que aún no está claro si dispondrá de dos viales exclusivos o sólo tendrá uno de ida y vuelta para dejarle el otro a las guaguas de Global. El anteproyecto del Sistema de Transporte Público Rápido (BRT) contempla dos alternativas para la calle Rafael Cabrera y habrá que esperar al proyecto definitivo, que aún está pendiente de salir a concurso, para establecer el trazado definitivo de la MetroGuagua por este tramo de apenas 800 metros de longitud, para el que se ha calculado un coste de 2,4 millones. La calle tiene en la actualidad cuatro carriles en sentido sur-norte, de los cuales uno es sólo para guaguas y taxis.
Lo único que es definitivo por ahora es que los carriles para los automóviles se quedarán en solo dos y que desaparecerán los aparcamientos que están situados en la actualidad en el lado de poniente de la calle.
En la parte central de la calle habrá una mediana con árboles, que servirá también para separar el tráfico de vehículos del carril de la MetroGuagua.
Una de las dos alternativas que se contemplan carece de carril exclusivo para las guaguas de Global y establece dos viales para la BRT, uno de ida y otro de vuelta. La segunda opción que se baraja apuesta por el tránsito de la MetroGuagua por un solo carril en ambos sentidos, en el trayecto que va entre San Telmo y el Teatro Pérez Galdós, una solución que los técnicos califican de "extrema" y "no óptima para el funcionamiento del sistema", pero "técnicamente posible, que se justifica porque se logra una "mayor fluidez" en el recorrido de las guaguas de Global a su estación, "sin cruces con el BRT y sin interferencias con el tráfico mixto".
Guaguas de Global
Esta alternativa rechaza eliminar la entrada de las guaguas de Global por el elevado volumen de tráfico que este transporte colectivo genera -unas 170 guaguas pasan a la hora en los accesos a la estación- y se mantiene su paso por la parada del Teatro.
Por otro lado, desviar la entrada de los vehículos de Global por Bravo Murillo saturaría de tráfico de esta calle e impediría a los viajeros del transporte interurbano conectar con las guaguas amarillas en la estación del Teatro.
De momento hay sólo dos tramos en obras, el de Pío XII y el del paseo Blas Cabrera Felipe, el Cono Sur, que conecta con la estación subterránea de Hoya de La Plata, un proyecto que está pendiente de adjudicar, porque el concurso para la redacción del proyecto ha quedado desierto.
La intervención en el tramo de Blas Cabrera Felipe, que es la continuación del paseo de San José, se inició en octubre pasado y está previsto que concluya en septiembre del próximo año. El tramo discurre por los barrios de Casablanca I, Zárate y por los accesos a El Lasso y tiene una longitud aproximada de unos 1.300 metros aproximadamente. Este tramo, que ejecuta el Grupo Joca, tiene un coste de poco más de cuatro millones.
Por su parte, el tramo de Pío XII comenzó el pasado verano y contempla la intervención en un tramo de casi dos kilómetros entre Ciudad Jardín y Alcaravaneras. Tiene un presupuesto de 6,7 millones y ha sido adjudicado a la Constructora San José.
El mes pasado se adjudicaron la redacción de los proyectos de la Avenida Marítima, entre la altura del cementerio de Las Palmas y el Teatro, y el que contempla el desplazamiento de los carriles de la Avenida Marítima hacia el recinto portuario en la z ona del istmo de Santa Catalina. El siguiente tramo que está previsto que salga a concurso a principios del próximo año es el de Mesa y López, cuya peatonalización entre la plaza de la Victoria y la Base Naval arrancará con la instalación de los carriles de la MetroGuagua.
