El sector del taxi de Las Palmas de Gran Canaria afrontará en los próximos meses la actualización de sus tarifas. Tras el rechazo de los profesionales a las libranzas obligatorias de dos días en el referéndum del miércoles, este negocio espera dar el siguiente paso. Tanto el sector como el Ayuntamiento se encuentran a la espera de la próxima Comisión de Precios del Gobierno de Canarias que autorice la unificación tarifaria dentro del término municipal de la capital. De esta manera, se dejarían de aplicar las tarifas interurbanas en los barrios más alejados del centro de la ciudad. Además, esta agrupación llevará consigo una actualización de los precios públicos.
Francisco Reyes, presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos del Taxi (ATAT), manifestó ayer su satisfacción por los resultados de la consulta del miércoles. "Estamos muy contentos por la asistencia masiva y por el resultado, un 80% deja pocas evidencias de cual es el sentir real de los taxistas de la ciudad", apuntó Reyes. "Esperamos que esto se mantenga en el tiempo, que no sea solo una prueba para el actual grupo de gobierno, si no también para los que vengan", añadió.
El Ayuntamiento de la capital grancanaria reconoció ayer en un comunicado que respetará el resultado que ha salido de las urnas. Desde la concejalía de Movilidad ponen ahora la vista sobre la tarifa única dentro del municipio que podrá beneficiar a más de 31.000 residentes de la ciudad.
Además, esta medida va de la mano de una actualización de los precios vigentes en la actualidad. Se trata de una de las mayores demandas de las asociaciones del sector una vez superado el tumulto de las libranzas. "Hay que actualizar las tarifas porque subieron los sueldos y las cotizaciones a la seguridad social", matizó Reyes. En este caso, existe consenso entre ambas partes.
Por otra parte, desde ATAT también reclaman como prioritario poder llevar pantalones vaqueros durante el servicio. "El sol desgasta la tela de los pantalones reglamentarios y un vaquero podría ser más práctico", apuntó Reyes. Además, Heriberto Dávila, director general de Movilidad del Ayuntamiento, informó ayer que en un mes y medio, comenzarán las inspecciones documentales a todas las licencias municipales de taxis de la capital. También acordarán con el sector impartir cursos de formación en idiomas.
Por su parte, el líder de la oposición, Juan José Cardona, expresó ayer que la respuesta contundente de los taxistas deja en "mal lugar" al concejal de Movilidad, José Eduardo Ramírez. "Ha perdido dos años y medio pues ahora vuelve al punto de partida pero en peores condiciones porque ha perdido toda la credibilidad ante los profesionales del taxi", apuntó el edil popular. Además, calificó de " verdadero desastre" las políticas de movilidad de la corporación municipal.
Beatriz Correas, concejal por Ciudadanos en la capital, se manifestó en la misma línea. "Ha quedado patente el fracaso del tripartito en la gestión del sector del taxi, la consulta refleja que no quieren días libres, su forma de gobernar es la de imponer y no escuchar", consideró.
En cambio, Unidos por Gran Canaria sí apoyaba la propuesta del Consistorio. La concejala Ángeles Batista afirmó ayer que es evidente que hay una negativa mayoritaria en el sector. "El Ayuntamiento debe ahora recapacitar y entender cual es la opinión de los taxistas", apuntó la portavoz de Unidos. "Está claro que la regularización del sector tendrá que venir por otro lado", añadió.
