De la Cueva Pintada de Gáldar a los minecrafts -figuras cuadradas - de los videojuegos, pasando por las esculturas de Plácido Fleitas y la obra arquitectónica de César Manrique. Es parte del recorrido que los escolares del Ceip Salvador Manrique de Lara han hecho por la historia del arte para aprender conceptos y contenidos de disciplinas artísticas como la arquitectura, la escultura, la pintura, la fotografía, el cine, la música, el teatro, la literatura, el arte digital y el dibujo siendo ellos mismos artistas. Su recompensa es que sus obras, muchas de ellas con materiales reciclados, se han expuesto en el centro.
La reproducción de la cueva de Gáldar en el cuarto de aperos es quizás la obra más llamativa, pero en los pasillos del colegio, que tiene este curso académico 269 alumnos, la creatividad se palpa con echar un simple vistazo a los carteles de cine, a las esculturas de barro imitando las piezas de Fleitas que han hecho los más pequeños, en las casas fabricadas con cartones a imagen de las ideadas por César Manrique o a las fotos en blanco y negro recordando cómo eran antiguamente las aulas en Canarias que hicieron con las tablets. También los minecrafts que han construido con cajas de cartón.
La coordinadora del proyecto, Charo González González, explicaba ayer que la actividad, en la que ha estado implicado todo el centro, trata de mostrar los conocimientos que los chicos han adquirido en los primeros meses del curso académico aprovechando la Semana de la Ciencia, aunque este año han querido "dignificar las artes". Todo ello contextualizado el ámbito canario y en inglés puesto que el centro imparte Ciencias en dicha lengua.
Los propios alumnos han expuesto a sus compañeros sus obras como si de guías de museo se tratasen, ya que también han hecho hincapié en la labor de esta figura museística.
Elena Montero de la Rosa, Yerutí Pérez Cárdenes, Dara Suárez, Pérez, Hugo León Acosta, Jorge García Torres y Daniel Delgado Suárez, alumnos de tercero de Primaria, daban cuenta ayer de ello al enseñar a este diario la Cueva Pintada y lo que son los minecrofts. Y en su explicación no faltó quién utilizaba la cueva, el significado de las pinturas, así como alguna palabra de los antiguos pobladores de la isla. Tampoco Arminda, aunque en esta ocasión en versión minecrafts y contruída por la pequeña Dara, quien reconoció que la idea de trabajar con los videojuegos fue de su compañero Alexander.
La propuesta entusiasmo tanto a los pequeños que, en esta ocasión, los profesores se tuvieron que poner las pilas para saber qué eran los minecrafts y cómo podían formar parte del proyecto educativo. Así lo reconoció ayer la coordinadora del mismo. " Los profesores tenemos que salir de nuestra zona de confort, partir de lo que los niños nos dicen en las aulas para aplicarlo al aprendizaje. Creo que es el secreto para ilusionarlos en la tarea escolar, aunque cuesta a los profesores porque a veces te vas a casa preocupado porque no se dio el cuadernillo pero, a cambio, aprenden otras cosas".
El director del centro, Miguel Ojeda, destacó, por su parte, el trabajo participativo de las familias en el proyecto, "y en todos los que realiza el centro. Abrimos el centro al barrio y a las familias porque necesitamos que sepan lo que estamos haciendo".
La jefa de estudios y profesora de inglés, Tenesoya Sánchez Pérez, explicó que el centro se desarrollan varios proyectos educativos - Tecnologías de la Información y la Comunicación, Piles, Bibliotecas, Convivencia e Igualdad; entre otros- y que cuenta con un aula enclave. "Como siempre nos faltan recursos humanos para atender la diversidad del centro y para dedicarle el tiempo necesario a los proyectos", comentó en referencia a las necesidades del centro, un histórico en el barrio de El Fondillo ya que fue inaugurado en 1931 después de Salvador Manrique de Lara, dueño de las fincas de Cruz de Quevedo, nombre que recibe la zona, donará un solar para la construcción de una escuela y una iglesia, así como de una urbanización de casas.
