El jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó hoy que "Somalia es un riesgo" y exigió una respuesta "contundente y preventiva" de la comunidad internacional para evitar que el país se convierta en "un caldo de cultivo" para el terrorismo, los secuestros y la piratería.

Zapatero, presidente de turno de la UE, hizo este llamamiento como invitado de honor en la inauguración de la XIV Cumbre de la Unión Africana (UA), donde condenó "la indignidad" de la esclavitud que sufrió el pueblo de África, "un episodio nefasto de la historia de la humanidad".

En un discurso en el que ratificó el compromiso de España con la ayuda al desarrollo, hizo hincapié en la necesidad de apoyar al gobierno federal de transición somalí porque el esfuerzo internacional realizado hasta el momento es "insuficiente".

En este contexto, garantizó que el compromiso de España con la paz, la estabilidad y la lucha contra el crimen organizado es "firme" y reclamó la movilización de la comunidad internacional encabezada por la ONU.

El presidente del Gobierno español instó también a todos los líderes africanos presentes en la Cumbre a avanzar hacia la libertad, la paz y la democracia, tres valores que, según les advirtió, exige extender el pluralismo político y social, luchar contra la corrupción, comprometerse con los derechos humanos y erradicar la tortura y la pena de muerte.

"Un buen amigo de África".

Zapatero fue presentado ante la cumbre por el presidente de turno de la UA, el libio Muamar el Gadafi, quien recordó que España es "un buen amigo de África".

Con el "legítimo orgullo" de presentar al país que más ha incrementado la ayuda al desarrollo a África en los últimos años (ha pasado en cinco años de 225 millones de dólares a más de 2.200 millones), abogó por mejorar la educación, la salud y el desarrollo del sector agrario para superar el reto de la miseria.

En nombre de la UE, mostró su esperanza de que esa unión sea "cada vez más perfecta".

Según apuntó, en los últimos años África se mira de otra manera desde la UE, que ha asumido que hay que hacer una política "con África, no para África" como actor internacional decisivo ante los grandes retos de la seguridad o el cambio climático.

El presidente recordó que España contribuye con 45 millones de dólares a la UA y agradeció a la organización que se haya adherido al Grupo de amigos de la Alianza de Civilizaciones, iniciativa que, a su juicio, puede reducir conflictos y fomentar el entendimiento en el continente.