Solo una victoria más. Eso es lo que le hace falta a la selección española femenina de baloncesto para lograr ser eternas. Esta tarde, el combinado nacional buscará este jueves en el Arena Carioca 1 (19.00 horas, La 1) asegurarse la medalla de plata del torneo olímpico imponiéndose a Serbia, vigente campeona de Europa, un rival a la que ya ganó en su debut en Río de Janeiro. Todo con la participación de las grancanarias Leonor Rodríguez, Leticia Romero y Astou Ndour.

Después de que una agónica y milagrosa canasta de Anna Crunchelito Cruz abriese a España la puerta a las medalla contra Turquía, las de Lucas Mondelo no piensan en otra cosa que repetir el triunfo (59-65) del domingo 7 de agosto, una victoria que labraron en la segunda mitad y que no estuvo clara hasta que la pívo formada en el CB ISlas Canarias, Astou Ndour, cerró el resultado final a cuatro segundos del final del choque.

Por ello, tienen claro que el partido de hoy volverá "a ser una guerra" durante 40 minutos, en plabras de Anna Cruz, la heroína del martes frente a Turquía. "Nos tenemos muchas ganas Serbia y España. Ya nos hemos enfrentado a ellas, tienen un equipo muy duro y vamos a tener que jugar otra vez 40 minutos superintensos", aseguró Cruz.

"El partido contra Serbia lo ganamos, pero fue muy duro, muy ajustado y Serbia ha demostrado porqué está en estas semifinales", ahondó en la dificultad que les espera a ella y sus compañeras la estrella de la selección, Alba Torrens (16.5 puntos, 5.7 rebotes y 15.7 de valoración en el torneo olímpico).

Asimismo Silvia Domínguez, base de la segunda unidad del equipo español, tiene claro que Serbia será un rival extremadamente complicado después eliminar en cuartos a la segunda gran favorita, Australia. Aunque el técnico español consideraba a Australia la única selección con alguna opción de ganar a Estados Unidos, indiscutible favorita al oro, a Silvia no le supuso una gran sorpresa el triunfo balcánico. "Nosotras éramos muy conscientes del nivel que tiene Serbia, de que nunca puedes subestimar a un campeón de Europa y de que podía hacer eso", confesó.

"Yo estaba prácticamente segura de que el partido estaba al 50 por ciento y de que podía ganar a Australia", añadió, en todo caso segura de que un resultado así no cambia la disposición española de cara al partido de mañana. "Saber que han ganado no ha cambiado en nada nuestra mentalidad", avanzó.

En Serbia destacan especialmente cuatro jugadoras, la escolta Ana Dabovic (14.2 puntos de media), la alero Sandra Petrovic (15.8 puntos y 5 rebotes para sumar 17.2 de valoración) y las ala-pívot Jelena Milovanovic (16 puntos) y Danielle Page (10.8 puntos, 5,5 rebotes y 14,5 de valoración), esta estadounidense nacionalizada en el país balcánico.

Completan la rotación de nueve jugadoras de Marina Maljkovic, con evidente menor protagonismo, las exteriores Tamara Radocaj, Milika Dabovic, Sasa Cado, Nelena Jovsanovic y Dajana Butulija. En el partido del debut olímpico, España frenó bien a Ana Dabovic (4, 0/7 TC) y Petrovic (4/13) y fueron Milovanovic (17 puntos) y Page (otros 14) las que guiaron a las balcánicas en el choque.

España fue al principio por detrás (13-4), pero posteriormente Marta Xargay (15 puntos) y Astou Ndour (11 puntos y 12 rebotes) la encarrilaron hacia el triunfo en la primera final de un torneo en el que esperaba muchas y que encaró determinada a conseguir una medalla. Si ganan a Serbia se asegurará la plata, un territorio desconocido en el baloncesto nacional. Pase lo que pase, España cerrará el ciclo olímpico entre Londres 2012 y Río de Janeiro 2016 siempre en semifinales de los torneos, una brillante trayectoria que deja al descubierto el valor de esta selección. Un ciclo que puede acabar haciendo de este grupo una leyenda.