El pasado septiembre, el Sr. Brufao -Repsol- manifiestó que el nombramiento del Sr. Cañete beneficiaría a España y a Europa. Después del examen de la Comisión Europea, el Sr. Cañete es designado comisario de Energía y Medio Ambiente, por entender entre otras consideraciones que en su actuación en el expediente de las prospecciones en Canarias no había indicios de infracción del derecho "procedimental" medioambiental europeo; o sea, las formas, sin entrar a valorar lo ético, ni lo estético de su pertenencia a una empresa que puede ser beneficiaria. En esas fechas, el hierático Sr. González Pons confiaba en que el nuevo comisario solucionara el conflicto con Francia para el paso de un gaseoducto que uniera el gas argelino, a través de España, con aquel país y Europa. Mientras, el primer ministro argelino, Abdemalek Sellal, reconocía que si sus reservas se mantenían como hoy, en el año 2030 sólo podrían abastecer su mercado interior, con muy pocas posibilidades de exportar.

¿Concuerdan los objetivos con la realidad? ¿Cuál es la razón de esta persistencia? ¿Fraude, engaño, malicia, mezclados con parte de verdad para confundir? ¿Políticas de favor e intereses? ¿Es delito pensarlo?

Voces autorizadas, como la de Andrew Haines, exdirector de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, denuncian que no se alcanzan acuerdos para frenar el cambio climático por cuestión de intereses, manifestando su importancia para la salud.

Hans Josef Fell, director del Foro europeo de la Seguridad Energética, asegura que, en diez años, Europa podría superar la dependencia de Rusia, con energías alternativas y eficiencia energética, dada la madurez del conocimiento de las mismas y que podrían cubrir un 60-70% de su demanda. Denuncia, al mismo tiempo, que la Comisión europea está frenando la Ley sobre Energías Renovables, en Alemania, apoyando la atómica, mucho más cara que el viento y el sol. Añade que los inversores en energías convencionales pierden dinero y que muchas de las centrales térmicas no están conectadas a la red, en Alemania.

Michel Jarrant, secretario general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), manifestó el pasado septiembre, ante la mayor emisión de CO2 a la atmósfera en los últimos 30 años, que "se nos agota el tiempo" para tomar medidas urgentes. Añade que el carbón, el petróleo y el consumo energético para la producción de cemento han sido los principales causantes.

Stephen Heintz, presidente del Rockefeller Brother Found, en vísperas de la Cumbre sobre el Clima de Naciones Unidas, afirmó que el futuro son las energías renovables y, según The Guardian, están retirando fondos de las inversiones en combustibles fósiles (petroleras, carboneras y gas natural).

¿Opiniones a despreciar? ¿Cuál es el secreto de la insistencia en las prospecciones cuando países avanzados, que el propio Gobierno pone de ejemplos, van en sentido contrario?

En septiembre de este año, los EE UU dan a conocer la creación de la mayor reserva marina del mundo, que se extiende por 1.300.000 Km2, en el océano Pacífico, siete islas y atolones de coral, situados entre la Islas Marshall, Kiribati y Hawái, donde estarán prohibidas la pesca comercial y la explotación minera, permitiéndose la pesca artesanal y las actividades acuáticas. Con esta medida duplica los territorios marinos protegidos.

Existen otras reservas, aunque pertenezcan administrativa y políticamente a varios países. Es el caso de la reserva marina de las islas Chagos, en el océano Índico, creada por el Reino Unido en 2010 y que abarca una superficie de 640.000 Km2.

Australia creó el Parque Nacional Marino del Mar de Coral en 2012, que abarca una superficie de 990.000 Km2. Junto a este y en el mismo mar de Coral, Francia ha creado, en abril de este año, un Parque Natural Marino de 1.300.000 Km2.

La organización Oceana ha dado a conocer el hallazgo de dos montañas submarinas, Dacia y Tritón, al norte de La Graciosa, que cuenta con gran diversidad de esponjas de cristal, peces de profundidad, gorgonias y corales negros. Tienen más de 2000m de altura y forman parte de un conjunto de montañas, situadas entre Canarias, Madeira, la península Ibérica y Marruecos, que sirven de conexión para las especies que viajan entre estas zonas. Según dicha organización, a través del Proyecto LIFE + indemares, el Gobierno español ha estudiado otra de las elevaciones que pertenecen a este conjunto, el banco de La Concepción, una de las futuras reservas marinas protegidas. Por su parte, Portugal ha presentado un plan para proteger toda esta zona.

¿Nada que decir por parte del Gobierno central, al respecto? ¿A qué juegan? ¿Por qué ese descaro? ¿Quiénes se creen para despreciar la decisión de los canarios? ¿Más mentiras y ocultaciones? ¿Por qué no convocan elecciones anticipadas y tras las mismas decidir sobre las prospecciones? ¿Secreto de estado?

Parece que el PP está revuelto, mientras un sector se llena la boca hablando de neoliberalismo, competitividad y globalización, vendiendo la marca España de unos pocos, otro sector, el de los linajes, se ha impuesto en el poder, con las consecuencias vergonzosas que todos conocemos. La también hierática Sra. Cospedal alababa la inteligencia del nuevo comisario, poniendo especial énfasis en el manejo de idiomas, cosa a tener en cuenta dado el rechazo sistemático a lo diferente por parte de ese sector de linajes, incapaces de hablar no sólo gallego, euskera, catalán, inglés o alemán, sino incluso el tan próximo bable. Aptitudes, formas y apariencias propias de ese mundo filocortesano y endogámico de linajes que no se cansan de mirar hacia atrás y al que pretenden que les estemos agradecidos. Parecía que habían cambiado, pero no; como dice un admirado amigo, es como pretender que los tiburones se vuelvan vegetarianos.

No dudemos en defender la forma de vida que mayoritariamente decidamos, de forma consciente y responsable. Donde todo y todos estamos afectados por lo otro y los otros y nos obliga a buscar nuestro punto de equilibrio, nuestro término medio. Las elecciones no son un cheque en blanco a los políticos y hay que exigirles cuentas y desenmascararlos, cuando la ocasión lo requiere.