La intervención de Fernando Clavijo en la cita del Club Skal en el hotel Costa Meloneras ha sorprendido agradablemente a la audiencia allí presente, me sopla mi admirada XP13, que se coló en la cita del candidato con los profesionales del turismo. Clavijo marcó distancia del gobierno de Paulino Rivero (una vez más) y dijo representar "a la nueva Coalición Canaria". El todavía alcalde de La Laguna se hizo muy cercano y medio grancanario. Dejó claro que su madre es de Escaleritas, de lo más auténtico de la capital. Se comprometió a todo lo que le pidieron excepto a una petición de una empresaria de rent a car, que con un 13,5% de IGIC en los coches de alquiler le pidió que dejase el impuesto como el de los hoteles, al 7%, y no como si se tratara de un artículo de lujo. "No puedo prometer que tenga solución", declaró Clavijo con sinceridad aplastante. Las buenas relaciones con Madrid (PP) y las críticas a Gesplan no por conocidas pasaron desapercibidas. Alguno de los presentes, más popular que nacionalista, decía: "Clavijo convenció". De ahí al voto hay un trecho.