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La que se avecina

Bibi no es bobo

Bibi Netanyahu se ha salido con la suya y sigue siendo la pesa más fuerte en la delicada balanza del poder en Israel. Las encuestas lo daban como perdedor, o a lo sumo logrando un empate, y ha ganado las elecciones. ¿Cómo y por qué? Es difícil de explicar.

En el complicado sistema electoral hebreo es muy difícil formar gobierno, y Bibi sigue haciéndolo. Se ha convertido en el premier más duradero de la historia israelí. Llegó hasta el extremo de -durante la campaña electoral hebrea- viajar motu proprio a USA, el aliado más fuerte e importante de Israel, para oponerse allí nada menos que a la política del presidente Obama con respecto a Irán. Eso es lo que se llama tener "chutzpah", término hebreo que significa algo así como caradura. Viajar al país más fuerte del mundo para inmiscuirse sin ser invitado por el gobierno en su política -claro que con el apoyo de la oposición republicana allí- es algo que no le cayó bien a nadie, salvo a dicha oposición, y por supuesto, como muestran los resultados, al electorado israelí.

Las cosas no van bien para Israel en lo interno. La economía no progresa, la desigualdad aumenta, como casi siempre que gobierna la derecha, y la popularidad de Bibi estaba en caída libre. Netanyahu tomó el toro por las astas -hay que tener cojones para hacerlo así- y fue a USA a confrontar nada menos que a Obama (que, reconozcámoslo, es un "pato cojo" sin futuro político). Los resultados están a la vista. Bibi ha ganado.

Lo que le espera ahora no es fácil. Tanto USA como la UE, y no digamos los países emergentes, se le opondrán fieramente. USA y la UE necesitan el apoyo de Irán en su lucha contra el terrorista autoproclamado Estado Islámico, su problema más acuciante, más grave. El acuerdo con Irán lleva tiempo a punto de ser alcanzado, pero no llega. La oposición de Netanyahu a ese acuerdo no será para nada decisiva y el acuerdo probablemente se logrará. Pero Netanyahu ha logrado su objetivo: ganar las elecciones.

Decididamente Bibi no es bobo. Para nada. Es más, es verdaderamente un peso pesado, un líder sumamente hábil y fuerte.

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