La película Crumbs, el primer filme de ciencia ficción español rodado en Etiopía, describe como en el futuro uno de los supervivientes del hundimiento de la civilización se dedica a recoger los restos que quedan del antiguo mundo.
Esas son las migas a las que da título la película, y como dice la locución, francamente esta producción no está para dar migas a un gato, ya que por su endeblez sirve para muy poco.
En realidad, lo mejor de esta película de ciencia ficción post-apocalíptica son las escazas pinceladas humorísticas repartidas a lo largo de su metraje, como la de ver que la humanidad superviviente adora a un dios que es el exjugador de baloncesto estadounidense Michael Jordan.
De hecho, si este filme de Miguel Llansó hubiese seguido en esa línea, utilizando los recursos y convenciones del cine post-apocalíptico con el propósito de crear un efecto cómico, quizás el resultado hubiese sido muchísimo mejor como una parodia de este subgénero.
Lamentablemente, una producción que, por lo singular de sus localizaciones en el país africano, podría haber resultado sorprendente, se queda simplemente en una curiosidad bastante aburrida que sólo se salva por el ligero toque onírico y surrealista que poseen las mejores de sus escenas.
