Querido amigo, un rollo de papel higiénico suele medir, aproximadamente, unos treinta metros de largo, y se calcula que, entre todos los españoles, gastamos casi tres mil millones de rollos al año. Es posible que ya supieras esto, Gregorio, pero seguramente no sabrás, que Nokia, la que fuera hasta hace poco una de las mayores potencias de la telefonía mundial, era en sus inicios una fábrica de papel higiénico. Nokia es el nombre de un laborioso pueblo del sur de Finlandia que tiene algo más de treinta mil habitantes, y es conocido por su industria de caucho y papel. De allí tomó su nombre esta empresa de papel higiénico y luego la de telefonía móvil.
Parece curioso cómo pueden cambiar las cosas. Qué tendrá que ver la complicada tecnología de la telefonía móvil con la simple elaboración de un papel tan humilde. Aunque, siempre se ha dicho, que el inodoro es un buen lugar para la reflexión, así que, tampoco es tan extraño que alguien que se dedica a la fabricación de miles de rollos de papel higiénico se le haya ocurrido esa revolución tecnológica en su empresa, cuestión que podría haberse decidido durante el uso y disfrute de aquella primera producción profiláctica. Por algo será que muchos también opinan que El Pensador, una de las esculturas más famosas de Auguste Rodin, toma como referencia esa postura del ser humano, en su ejercicio más dócil, modesto y necesario. Mi amigo Antonio Giraldo, destacado escultor manchego-canario casado con Eva, una atractiva mujer finlandesa, decía que los catálogos de arte se hacen en papel cuché-brillo para que la gente no se limpie el culo con ellos. Esclarecedora conclusión a la que llega nuestro querido y puntilloso artista.
Volviendo al papel higiénico, una cuestión que nos toca muy de cerca, parece que, a lo largo de nuestra vida, nos pasamos una media de tres años sentados en "el trono", así que, los más prolíferos, gastamos kilómetros de papel higiénico, amputándole a la naturaleza la cantidad de madera correspondiente. Pero este despilfarro puede que tenga una pronta solución según los japoneses, que ya están usando unos inodoros que disponen de una manguerita de agua tibia y un chorro de aire para dejarnos el trasero bien limpio y seco después de "apretar", como dicen los valencianos. No sé si el cálculo de los miles de millones de rollos de papel se ha hecho antes o después de la convocatoria de elecciones municipales, autonómicas y generales porque, entre unas y otras, vamos a necesitar el doble de papel higiénico para atajar la cagalera que les ha entrado a estos nuestros actuales próceres de la patria. Un abrazo... y no te olvides de tirar de la cadena, y hasta el martes que viene.
