Y regresamos a la atención a atentos lectores e informantes como Juan Adolfo Álvarez, al que no se le escapa una. Las luminarias de la GC-2 en su primer tramo están pintadas de azul y amarillo, explica. Y desde el cruce del Puertillo a la rotonda de Bañaderos en Arucas, añade, no tienen pintura ni azul ni amarilla. Es un apunte, sugerencia, queja o lamento. Para que las autoridades, dice él, del Cabildo, completen lo inacabado. Dicho queda.