La Provincia - Diario de Las Palmas

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El periscopio

No lo entiendo, ¿y usted?

Ustedes a lo mejor sí, pero yo no. Por ejemplo, no entiendo que las guaguas urbanas quieran detenerse en sus paradas y se encuentran que no hay sitio para ellas porque otros vehículos se colocan allí indebidamente. Los agentes de movilidad municipal deberían ocuparse más de este asunto porque, a veces, los voluminosos autobuses tienen que parase en mitad de la calle, con las consecuentes molestias para los demás. No entiendo cómo algunos conductores no ponen los intermitente cuando quieren cambiar de dirección o realizar alguna operación imprevista. Es como si creyeran que así ahorran energía o luz, a costa de una colisión o un roce con otros coches. De igual forma, habría que volver a examinar a los conductores que no guardan las distancias con el auto que llevan delante. Si frena éste, colisión al canto. Pero eso son males menores comparados con los que la Guardia Civil observa en sus helicópteros a lo largo de las carreteras españolas. Desde ahí arriba se ven auténticas barbaridades, que terminan, generalmente, en accidentes graves.

No entiendo que la policía llegue a un lugar haciendo un ruido de mil demonios con sus sirenas cuando alguien les comunica que se está cometiendo un atraco, o algo por el estilo. O sea, en vez de venir silenciosamente y atrapar a los delincuentes, les dicen: "Allá vamos, muchachos", para que puedan escapar, o peor aún, les prevengan para enfrentarse a las fuerzas del orden. Debe ser que ese es el protocolo a seguir. Pero no lo entiendo...

No entiendo cómo puede haber una madre que arroje a un contenedor a un hijo recién nacido, o que haya padres que maten a su esposa, o a su expareja, llevándose también por delante a sus hijos.

¿Por qué no se matan ellos solitos sin tener que cometer esos crímenes horrendos? ¿Qué es lo que puede pasar por esas cabezas para que diariamente ocurran hechos de esta naturaleza? O si no, ¿qué es lo que mueve a algunos fanáticos que cometen atentados y que matan a cientos de inocentes? ¿Cómo se puede matar en nombre de alguna divinidad, o por una idea política o religiosa? Se tiene que estar loco de remate, o ser terriblemente perversos.

No entiendo tampoco que el ser humano, desde el principio de los tiempos, haya estado inventando instrumentos y artilugios que no tienen otra finalidad que la de matar, acabar con la vida de otros seres humanos. Ahora se han perfeccionado tanto que tenemos unas armas de destrucción masiva que pueden acabar con toda la humanidad, y de paso con todo el planeta, en menos de media hora, si se utilizase todo el arsenal atómico que hay almacenado por ahí. Ya la primera prueba la tuvimos con las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki. En unos pocos minutos se acabó con la vida de 250.000 personas y otros miles quedaron con serias secuelas de radiación. ¡Qué gran ejemplo de "humanidad! Y dicen que estamos preparando la "tercera guerra mundial". ¡Qué alegría le entra a uno en el cuerpo al saber esto! ¿Por qué ese dinero que se emplea para matar o destruir no se utiliza para investigaciones útiles a la humanidad o para tratar de paliar el hambre y los desequilibrios existentes en el mundo? ¿Por qué no actuamos de una vez por todas como "seres racionales" y civilizados?

No entiendo que haya políticos en este país (o en cualquier otro, me da igual), que en un ataque de patriotismo y de ética se pongan a predicar para que se aplique la ley en determinadas cuestiones o desvíos constitucionales, y sin embargo estos predicadores han permitido que en el seno de sus partidos, algunos de sus miembros (y "miembras") se hayan atrevido a realizar financiaciones ilegales, llevarse comisiones y ganancias por sus gestiones municipales o de cualquier otra índole, que hayan ingresado capitales de dudosa procedencia en paraísos fiscales, o Dios sabe dónde, etc. como si todo ello fueran faltillas, propias de jóvenes gamberretes que no deben ser contempladas por esas mismas leyes que pregonan defender. ¿Esto que es, hipocresía o cinismo?

No entiendo que haya países pobres, gobernados por dictadores o falsas democracias, que presumen de tener ejércitos poderosos que les ayudan a mantenerse en el poder, mientras el pueblo se muere de hambre o carece de las más elementales prestaciones sociales. O que haya países ricos, también gobernados por golpistas, o no, y represores, que no respetan los derechos humanos, que son apoyados por naciones poderosas porque a éstas les conviene expoliar sus riquezas.

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