Un atento lector de Triana pone el dedo en la llaga sobre la gestión municipal, tanto del pasado gobierno popular como del tripartito actual. Cada vez que pasa por el parque de San Telmo y contempla el quiosco cerrado, y atraviesa la arboleda y no se puede detener para tomarse una cerveza con unos amigos se le cae el alma a los pies. Miles de turistas y el parque cerrado. Mucho cine y planes internacionales, y la micropolítica olvidada.