La música finalmente ganó y el cantante judío estadounidense Matisyahu, que fusiona reggae, hip-hop y rock con influencias judías en sus canciones, actuó anoche en el festival El Rototom Sunsplash de Benicàssim, en Castellón, tras la polémica. Su concierto fue cancelado después de que la organización le pidiera al cantante que se pronunciase sobre Palestina ante la presión de grupos que promueven el boicot a Israel. El artista se negó a hacer pública su postura y el concierto fue cancelado. Instituciones y organizaciones nacionales e internacionales se mostraron en contra de la decisión y, finalmente, la organización rectificó y volvió a invitar al artista. Matisyahu compartió escenario con los jamaicanos Etana Proteje y The Uprising Roots y el grupo estadounidense cabeza de cartel Soja.

Así que al margen de polémicas, la música fue el principal reclamo de los asistentes y el reggae, hip hop, rock y los ritmos calientes lograron tranquilizar y sosegar el ambiente. El Rototom promete regresar el próximo año.