La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Opinión

Gran Canaria de Primera

Sería bonito, conveniente y justo que en los medios de comunicación deportiva sonara mucho y fuerte el nombre de Gran Canaria porque recuerdo que en cuantas especialidades existen ha tenido y tiene gran número de campeones de España.

Son muchos. Natación, boxeo, náutica, balonmano, baloncesto, ajedrez, automovilismo, ¡casi todos vaya! han sido su terreno de labor y su cosecha a nivel archipielágico y nacional.

Me vino a mano la reflexión porque desde que fue construido nuestro estadio y viendo un partido en él nunca oi citar su nombre y apellidos (Gran Canaria) con tanto orgullo y tantas veces como el miércoles pasado dentro y fuera del campo por la Televisión y entre el público.

Quizá fuera por enfrentarse a un reciente y repetido campeón de Europa.

Quizá por acabar ganando por 2-0 a un Sevilla al que se recibió con melindres respetuosos y acabó sometido a la justa derrota con ráfagas casi inesperadas, o quizá porque ni el Sevilla llegó a ser tanque de energía habitual, ni Las Palmas aparece como reenganchado solo de alevín a ver qué sale.

Los analistas se vuelven locos explicando la fórmula ya encontrada y nosotros nos quedamos al amparo de las rachas de fortuna y empeño por seguir. Son los episodios de los que cuando no hay una justificación total se suelen zanjar sacudiéndonos la fácil explicación con aquello de que "el fútbol es fútbol", o sea, una caja de sorpresas.

El miércoles pasado, temblores aparte, se cabalgó lo suficiente. Hoy, con temblores presentes, estamos en Barcelona a punto de saber si los azulgrana aparecen pidiendo perdón como damiselas con sonrojo por haber expuesto al aire sus vergüenzas ante miles de celtas (4-1) "porque el fútbol es fútbol" o, por el contrario, aparecerán resoplando de furia buscando la absolución de quienes con no poca sorpresa les vieron caer.

Querrán ahora -según dicen- no sólo ganar los puntos, sino batir además su récord de goleada que un día lejano dejaron a la UD en el ocho a cero.

Este Barça siempre fue generoso por no decir "jeringón" con nosotros en materia de goles.

En fin que como "el fútbol sigue siendo fútbol" no vale olvidar que un día, con goles de Gilberto II y León ganaron allí 1-2,como en otra igual marcaron Germán y Niz.

Pero tanto si flotamos como si nos hundimos, que todo puede suceder, digo que tendremos que mantener y reforzar nuestra identificación con el Estadio de Gran Canaria en avisos e informaciones, más aún cuando vemos al mismo tiempo que están reduciendo distancias entre la cancha y el aliento de su gente, y haciéndonos sentir ese día ante el Sevilla como un reflejo del retorno a los viejos tiempos.

Aunque Paco Herrera tire otra vez de libreta buscando fórmula mágica, no sé si podrá encontrar la página apropiada, aunque ya vemos que en Vigo "el fútbol siguió siendo fútbol".

Compartir el artículo

stats