La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Cien líneas

Todo es nuevo

Australia, Brunéi, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur, Vietnam y EE UU acaban de cerrar un tratado de libre comercio. Se denomina Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP). Abarca a un conjunto de economías que suponen el 40 por ciento del PIB mundial. Casi nada. Es el mayor acuerdo de ese tipo capitaneado por EE UU desde que hace veinte años entró en vigor el Nafta, establecido con Canadá y México. Hace tres meses, los cinco países que forman con sus siglas los Brics -Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- constituyeron, con un capital estimado de 100.000 millones de dólares, un banco alternativo al FMI y al Banco Mundial. Representan el 40 por ciento de la población del planeta y una quinta parte del Producto Interior Bruto (PIB) del global. Dios. Además, de la misma tacada, China inauguró otra institución financiera multilateral, el Banco Asiático de Inversión en Infraestructuras (BAII), con sede en Pekín, que tiene asimismo un capital de 100.000 millones de dólares y al que se han sumado, atención, varios países occidentales como Francia, Alemania, España o el Reino Unido. Y, en fin, el acuerdo de libre comercio entre EE UU y la UE, conocido como TTIP, avanza hacia su firma definitiva entre una nube de zancadillas y boicot. Quiero decir que en apenas unas semanas está cambiando todo, tanto por las escalas en juego, con nuevos y gigantescos bloques económico-políticos, como por el sentido, siempre hacia el libre comercio. Aun así, como esas hiperáreas cuajan de forma paralela, si se enfrentan, pueden bloquearlo todo: peor el remedio que la enfermedad.

Compartir el artículo

stats