La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Opinión

Feliz Navidad, feliz Año Nuevo

Aunque parezca mentira la Navidad de los grancanarios, y en especial los aficionados al fútbol -que es lo que más abunda en nuestra sociedad-, tiene motivos para ser feliz si comparamos su situación con la de la Navidad anterior. Lógico, porque entonces recordamos estar en Segunda División y ahora es la Primera ¡Qué diferencia para tantas cosas!

Importancia y categoría de equipo, jugadores, y una afición que merecían una conquista por la que rezó casi todo el pueblo incluyendo al no aficionado y, hasta el ateo diría yo, porque sé que a la hora de la verdad, o tan solo de la conveniencia, todo el mundo, hasta los bichos, se agarran si es preciso a la frágil mata del perejil para mantenerse y no caer.

La UD Las Palmas no solo no cayó sino que dio el salto por el que estamos arriba, gracias a la fuerza, tensada entonces con críticas y alabanzas, que puso en juego la casi mayoría de jóvenes jugadores de la cantera y sus compañeros al mando de Paco Herrera como entrenador, y Miguel Ángel Ramírez como presidente.

¿No es cierto entonces que esta es, a pesar de todo, una feliz Navidad comparada con las de los 13 años anteriores lidiando por conseguir el ascenso sin éxito? ¡Sí! Es? ¡Feliz Navidad!

¡Gracias pues a todos los que participaron en la conquista de algo que seguirá estando ante sus ojos como una valiosa joya que el miércoles han de proteger frente al Granada. Una Primera División que pase lo que pase seguirá teniendo en su calendario el nombre de la UD con garantía hasta la primavera. En ese espacio de tiempo se condensa la defensa de honor y categoría futbolística de Ca-narias!

Lo incógnito e imprevisible está desde esta visita andaluza pegada a una doble salida San Mamés e Ipurúa -en Copa-.

Sigue después un áspero camino lleno de obstáculos que no van a sortear ni reducir los comentarios molestos que no tengan buena voluntad, ni las críticas de técnicos fuera de nómina que no se juegan nada más que la pluma o la lengua, descubriendo a toro pasado lo que se pudo hacer mejor. Queda por delante más de media Liga, y en lo que va de ella apreciamos que tanto o más que técnicos falta que a los obreros les salga bien, tengan tino, goles para conseguirlos, y responsabilidad en vez de tiquismiquis de vestuario, o de patrocinadores que desde fuera arguyen alineaciones; son gorgojos que aparecen en los momentos difíciles desequilibrando y enfrentando a los propios jugadores en la mayoría de los equipos chicos y grandes.

En la temporada anterior se acusaba a los jugadores de eludir el ascenso porque entonces cundirían las bajas a cambio de obligados refuerzos. No era justa la creencia de una parte de la afición que permaneció después fija y entusiasta como noble burro de carga que vino siendo en lo bueno y en lo malo. Pero no siempre tenía que ser así porque por la afición y en su nombre pudieran convertir ahora a entrenador, jugadores, presidente, consejeros y empleados en burros de carga soportando como ya hacen, pero esta vez con brillo, la responsabilidad, el amor propio y la vergüenza de los que juegan para que se esfuercen a practicar de forma continuada, y no con extraños arreones, la asociación del fútbol que ya han demostrado saber.

Si como ya vemos en 2015 dejan el gran recuerdo del ascenso merecen y tienen como les dedicamos hoy la Navidad y una ¡Feliz despedida del año!

Y ahora, por cortesía, costumbre, deseo y necesidad les estamos adelantando nuestro ¡Feliz Año Nuevo!

Mantengan la permanencia en Primera y procuren no fallar. Este no es solo el deseo para unos cuantos amigos y paisanos, que, por lo que significa, es, para Canarias entera, para un gran Archipiélago.

Y vale la pena responder positivamente.

Compartir el artículo

stats