Hay cohetes para romerías, el clásico volador, y cohetes espaciales. Esta última modalidad hace temblar a los ecologistas, que se huelen que una empresa nacional ha puesto a El Hierro en su punto de mira para lanzamientos, como denuncia el grupo Ossinisa, y que reclama a las instituciones que aclaren estos siniestros planes galácticos. En Canarias ya se intentó con el proyecto Capricornio, pero salió el tiro por la culata..., del propio cohete.