La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

WhatsApp Image 2023-10-26 at 12.03.57 PM (1).jpeg

Cartas a Gregorio

Manuel Ojeda

Carta de Santiago Carrillo a Adolfo Suárez

Querido amigo, no sé si estarás al día de la que están armando los tuyos y los míos por allá abajo. Se han dividido en cuatro o cinco grupos para ver de hacer lo mejor para España. Todos dicen tener la fórmula ideal para conseguirlo, pero debe ser que lo mejor no es lo mismo para todos. La gente se ha puesto de acuerdo para darles el voto, pero ahora son los partidos los que no se ponen de acuerdo para empezar a trabajar para la gente.

Cuando nos fuimos, tanto tus partidarios como los míos, se fueron turnando para repartirse el pastel y, cada vez que uno gobernaba, le perdonaba al otro sus golferías y así, cada uno cuidaba convenientemente del otro. Pero ahora la cosa se ha complicado y son al menos cinco a compartir.

Supongo que Pablo Iglesias no será plato de tu preferencia, pero el muchacho parece que piensa. No se puede decir lo mismo de Pedro Sánchez que es puro escaparate, ni tampoco de Rivera, que trata de imitarte como puede pero que solo es un niño de cartón piedra, un dulce azucarillo que se disuelve en la boca de la banca.

Por lo pronto, el problema catalán lo están llevando bastante mal. Tanto Rajoy como Mas se han metido en un callejón sin salida, Rajoy por no saber convencer ni motivar a los españoles de Cataluña y Mas por intentar convencer a los catalanes de que no son parte de España. Sin embargo, el referéndum no puede convertirse en un precedente para el resto de las comunidades españolas y, por más que quiera Podemos, eso no es libertad de expresión sino de dispersión, lo cual no es de recibo para España ni para ninguna otra nación.

Por lo demás, aquí donde estoy no pasa nada, o debería decir donde no estoy, porque nunca he creído que te vayas a ninguna parte después de morirte. Sin embargo tú, Adolfo, estarás en el Reino de los Cielos, que es en lo que siempre has creído. Ya ves que solo existen las cosas en las que creemos. Por eso hicimos la transición, porque nos la creímos. Ahora es una realidad histórica que todo el mundo respeta, aunque hace falta ser muy cándido para creerse que Franco, el Rey, Fraga, Felipe González, tú y yo hicimos un pacto de Estado para salvar España, menudos cuentistas. Pero la verdad es que nosotros pactamos para no seguir matándonos y, de paso, salvar lo que quedaba de España. Estos de ahora quieren pactar, pero para repartirse el poder y seguir haciendo lo que les da la gana.

Así están las cosas pero déjame decirte, y con esto acabo, que cuando llegué aquí no tardaron en hacerme la clásica novatada. Me dijeron que, pasado un tiempo y por buen comportamiento, me podrían conceder un deseo. A mí se me ocurrió ganarme ese derecho dejando de fumar que, además, no era tan difícil pensando en que aquí no tienen tabaco americano, que es el que a mí me gusta y también porque, con el humo y el olor a carne quemada que llega del infierno, tampoco es algo que me apetezca mucho. Una vez lo había conseguido me fui a preguntar por lo del deseo: que me dejaran reencarnar en alguien que fuera muy rojo. Después de hacerme esperar un buen rato, me dijeron que podría reencarnarme en Papá Noel... Qué pandilla de golfos.

Espero que no te aburras demasiado en la Gloria, Adolfo, pero si necesitas algo de calor humano, ya sabes dónde me tienes.

Un abrazo de tu amigo Santiago.

Compartir el artículo

stats