Panorama desde el puente

De Medio Oriente ni hablar. El Estado Islámico (EI, ISIS, Daesh o cómo se llame) lejos de ser destruido, mete miedo -sí, miedo- a grandes ciudades europeas y hasta a los mismos USA. Arabia Saudí -suní, como el EI- rompe relaciones con Irán -chií-. Putin intenta ser mediador. Complicado.

Europa, constreñida -no se me ocurre mejor palabra- a no crecer debido a la austeridad destructiva que impone por falta de cacumen -no nos engañemos- para encontrar algo mejor... Y con el terrorismo del EI golpeando no se sabe dónde ni cuándo, y el Brexit en el horizonte. También complicado.

USA. Año de campaña y elecciones: Hillary Clinton (con Bill Clinton a su lado) apunta a ganadora. Pero aun falta mucho de esa maratón y el diablo siempre puede meter la cola (como tantas veces allí).

Por ahora los media se centran en -el muy indecente- Donald Trump, por falta de algo más llamativo en el alicaído GOP, el Partido Republicano. Hillary debe conseguir que el poder económico -decisivo- no vaya sólo al lado Republicano sino también al propio. Muy complicado.

Obama, que quiso quedar bien con el calentamiento global, la economía y el Obamacare, borra todo eso con la otra mano intentando imponer el TPP al Pacífico, y a nosotros el TTIP, dejando a medio mundo en manos de las multinacionales (los Clinton no se han definido al respecto, pero no nos hagamos ilusiones), que nos empujan al nivel de China, o cerca en cuanto a derechos. ¿Quiere usted tener mano de obra barata y fácil de despedir? ¡Bienvenido al TTIP! Firme aquí, doctor Fausto.

Con el TTIP, si las multinacionales te abusan, roban o explotan, ve a quejarte a Magoya (como dicen en argot argentino por nadie), porque el Poder Judicial español ya no vale. Se impone el ISDS, un tribunal de arbitraje privado e inapelable. El TTIP nos sometería a un inapelable "Súper Joder Pudicial" privado. Más que complicado, feo. Muy feo.

Rusia, China y más

Putin ha encajado la pérdida de media Ucrania, pero pesa mucho en la otra mitad. Y tomó Crimea. Ahora pisa -mejor digamos bombardea- fuerte al EI en Siria. Ahí también encajó la puñalada de Turquía (OTAN) al derribarle un avión. Una de las virtudes de Putin es que sabe encajar sin perder imagen ni -aparentemente- fuerza. Encajó la pérdida de Ucrania, las sanciones subsiguientes, la bajada del precio del petróleo --su mayor exportación-, y lo de Turquía. Pero sigue fuerte con el tema Siria, firme en el control, y muy popular en Rusia.

China, por su parte también tiene problemas: la economía no crece tanto como otrora, y padece brotes de corrupción y terrorismo. La "meritocracia" china -los dirigentes son elegidos por sus méritos, no por los votos como en las democracias- funciona, pero con problemas. Demasiados como para buscarse más en el exterior (un polígamo con muchas mujeres conflictivas en casa, no busca las del vecino): China no es militarmente expansionista -nunca lo ha sido- y no tiene ni una sola base en el extranjero. Pero China crece en población y económicamente ya está a la par de USA o más arriba.

Los países emergentes también tienen problemas. En Latinoamérica, con Brasil a la cabeza, Dilma Rousseff está al borde del colapso; y Venezuela y Argentina votaron por la -digamos- derecha "neoliberal" contra la -digamos- izquierda "chavista" en el poder. En ambos casos el poder está aun muy contestado, repartido. Nadie sabe si las tornas cambiarán. Confuso.

Inmigración

Sobre todo el panorama se extiende el "problema" de la inmigración. Como bien vio Angela Merkel -inteligente doctora (cum laude) en física cuántica- la inmigración es siempre beneficiosa para el país que la recibe, y a Alemania (y a España) le hacían falta inmigrantes.

Todo el radioteatro tejido sobre la "resistencia a los extranjeros que nos quitan trabajo", tiene un claro trasfondo xenófobo y racista, y usa los mismos argumentos que se usaron antes contra los judíos: otra raza, otra religión, otra cultura. Se bordea el fascismo en Hungría (Orvan en sus murallas rechaza todos los inmigrantes... menos a los blancos) país que no debería estar en la UE, o con la segregación racista de la inmigración en Australia.

Ignoran que el inmigrante no quita trabajo, sino que lo crea, al aumentar -aún recién llegado- el consumo. Así se hizo grande USA. Francia en los años 70 recibió un millón de inmigrantes franco-argelinos, y la economía y el empleo mejoraron, lo mismo que en Israel -país muy pequeño- con la inmigración masiva de 700.000 judíos rusos en los 90. Pero la "historia oficial" es la contraria: la islamofobia (pese a ella, el mestizaje -más racial que cultural- en Europa será un hecho inevitable). La inmigración masiva produce sí, problemas logísticos, que se resuelven. Pero la inmigración es beneficiosa, y lo sería para España, donde también la población decrece.

La guerra

Militarmente la OTAN controla mucho del planeta y cada vez más, aunque la URSS que la justificara ya no exista. Rusia, con muchas fronteras que defender, tiene dos bases importantes en el "centro del antro": Sebastopol en Crimea, y Tartus en Siria, pero poco más, salvo -eso sí- más armas nucleares que nadie. La OTAN estaría preparada para ganar una guerra militar, Rusia una -muy hipotética- guerra nuclear. Pero la guerra por ahora es económica. Y la está ganando China.

Precisamente el intento de USA, Obama y las multinacionales de hacer firmar, ejecutiva y casi secretamente el TPP y el TTIP es una batalla de esa guerra económica con China. Pero China sigue ganando. Por ahora.