La traducción al español de la expresión inglesa gridlock es atasco. Pero hay algo más: grid significa trama, y lock candado, cerradura. O sea que gridlock es "trama cerrada", trabada, bloqueada por sí misma. Un ejemplo claro es un atasco de tráfico que afecta varias calles. Otro, la situación político-electoral de España; y más concretamente la de la izquierda.
Toda la trama de la izquierda española se dirige a echar al PP -Partido de Piedra- del poder; y con él a la desigualdad, la corrupción, el desempleo y la pobreza. Los votos están allí. Abuso de la estadística -que decía Borges- o no, la democracia indica que la mayoría de los españoles quiere eso.
Todos los caminos conducen a esa Roma. Pero se entrecruzan. Y sobreviene el gridlock, el atasco. Que los barones del PSOE, que los órdagos de Podemos, que la desunión de la Izquierda Unida (nombre digno de Gila)...
Los que conocen Historia recuerdan la Guerra Civil, en que la izquierda era más fuerte, política y militarmente, que Franco, pero perdió. Perdió por su desunión (y también por Hitler que metió la cola con las democracias mirando para otro lado). La gesta republicana fue heroica, gloriosa. Pero perdió.
Ahora la situación es parecida (aunque afortunadamente no militar). La izquierda es mayoría. Puede ganar. Debe ganar. Pero no gana. Todo indica que el pétreo PP podrá más. La historia se repite. La izquierda no encuentra su Tao, su camino. No tiene aún un líder de la grandeza de Willy Brandt u Olof Palme (aún se ignora quién y por qué lo mató). Ni siquiera como el más modesto Corbyn, que ha "izquierdizado" al Laborismo británico, y se mantiene.
¡Vamos barones del PSOE (y baronesas como Susana Díaz): dejen más en libertad a Pedro Sánchez para negociar! ¡Vamos independentistas (catalanes o no) dejen más libre a Pablo Iglesias para ceder! Sin concesiones no hay acuerdos. Sin acuerdos no hay unión. Sin unión no hay fuerza y sin fuerza viene la derrota. Viene un fresquito -aunque no general a veces muy frío- proveniente de Galicia y se lleva el gato al agua. Otra vez.
