En estos días hemos celebrado el décimo aniversario del Centro Sociosanitario El Pino. Ha sido un encuentro entrañable, en el que hemos podido agradecer, felicitar y felicitarnos como ciudadanos y ciudadanas de Gran Canaria por el triunfo colectivo que permitió recuperar hace 10 años este emblemático edificio para su uso sociosanitario. Un éxito colectivo que le debemos especialmente a la Plataforma El Pino es Nuestro, porque fruto de su activismo social, de su denuncia constante, hoy Gran Canaria puede reafirmar con orgullo que el Pino es "nuestro", un centro al servicio de las personas en situación de dependencia que cuenta con más de 400 plazas para personas mayores y personas con problemas de salud mental.
Son muchos los avances que se han producido en estos 10 años en la atención a las personas en situación de dependencia, pero también nos quedan objetivos importantes que alcanzar. Nuestra obligación es garantizar un envejecimiento digno, y dar respuesta a las distintas necesidades vitales que se puedan producir a lo largo de esta etapa de nuestra vida y atender a las personas en situación de dependencia en su diversidad, poniendo en valor sus capacidades.
Tenemos que contar con el valor de la participación y la contribución de las personas mayores a nuestra sociedad. Nuestro bienestar, nuestro nivel y calidad de vida dependen en gran medida de lo que nuestros mayores hicieron y trabajaron, de la riqueza y el valor social que han producido a lo largo de su vida. Es pues de justicia que reconozcamos y apoyemos lo que hicieron antes por nuestra sociedad, a la vez que nos comprometamos en la mejora de su calidad de vida. Porque el derecho a los cuidados es una cuestión de justicia social.
Desde la Consejería de Política Social y Accesibilidad del Cabildo de Gran Canaria estamos trabajando para lograr una isla que genere un entorno favorable para todas las edades y todas las capacidades. Para avanzar cada vez más en un modelo de atención centrado en la persona, que permita garantizar la autonomía personal como un derecho, para que todas las personas en nuestros centros, independientemente de sus capacidades, puedan desarrollar su proyecto vital y ser protagonistas en la toma de decisiones que les afectan.
Para prestar también apoyo a las familias, y a las y los profesionales que trabajan en los distintos centros y servicios. Mi agradecimiento a todo el personal que trabaja en nuestros centros sociosanitarios por su compromiso y dedicación. Ellas y ellos son quienes aportan la calidez humana de nuestros centros.
No podemos perder de vista que hablamos de un derecho, el derecho a la atención a las personas en situación de dependencia. Y para preservar ese derecho tenemos importantes retos que ya estamos afrontando.
Por un lado, estamos trabajando para seguir incrementando las plazas públicas en los centros sociosanitarios insulares y adecuar así la oferta y la demanda. En estos momentos contamos con 4.313 plazas públicas para personas en situación de dependencia: 2.027 de mayores, 1.563 para personas con discapacidad y 723 para personas con problemas de salud mental.
Además, estamos impulsando medidas que permitan favorecer oportunidades para que las personas mayores desarrollen sus proyectos vitales y al mismo tiempo que promuevan el sentimiento de bienestar, con unas condiciones de vida saludables para mantener la actividad y la salud física y emocional.
En definitiva, nuestro objetivo es crear las condiciones para que las personas mayores y en situación de dependencia puedan "sentirse en casa" estén donde estén, con el mayor nivel de autonomía posible porque es su derecho.
En el Cabildo de Gran Canaria estamos comprometidas y comprometidos con una isla para todas las edades y todas las capacidades.
(*) Consejera de Política Social y Accesibilidad del Cabildo de Gran Canaria
