Hace unos días, en el Foro Editorial Prensa Ibérica, el alcalde Augusto Hidalgo hizo algunos comentarios que, cuanto menos, son para empezar a preocuparnos. Concretamente y según publicó LA PROVINCIA, Hidalgo planteó la necesidad de crear una tasa de saneamiento. Así mismo, anunció el rescate de la tasa de basura, que en nuestra ciudad fue integrada en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) hace muchos años.
Hidalgo recordó que la creación de ambas tasas -saneamiento y recogida de basura- está contemplada por la Comisión Europea, y argumentó que "la Unión Europea dice que el saneamiento hay que pagarlo y algún día habrá que normalizar la situación, porque estamos incumpliendo las normas". Con respecto a la tasa de basura, anunció que el Cabildo va a duplicar en unos meses la tasa de residuos sólidos, algo que "va a ser tremendo para todos los Ayuntamientos".
El alcalde terminó esta parte de su intervención diciendo: "Hay que ser responsables y aceptar que tenemos que pagar y decirle a los vecinos que tenemos que mejorar la separación de la basura en origen, porque ello garantizará que bajen los costes y que la gente pague menos".
No se hizo esperar mucho la reacción de sectores ciudadanos al anuncio del alcalde de reinstaurar la tasa de recogida de basuras en nuestra ciudad. Un par de días más tarde, un portavoz del gobierno municipal dijo a LA PROVINCIA: "Somos conscientes de que va a costar un dineral [la tasa de recogida de basuras] pero no vamos a repercutirla a los ciudadanos por ahora". Lo que no dijo el portavoz es cuánto tiempo va a durar el "por ahora".
Con respecto a la necesidad de crear la tasa por saneamiento anunciada por el alcalde, todavía no ha habido reacciones de la ciudadanía, y esto me preocupa. En la actualidad y desde que en 1998, año de la firma del contrato de concesión del saneamiento y depuración a Emalsa, el saneamiento lo paga directamente el Ayuntamiento, con un importe de casi cinco millones de euros anuales. La depuración la cobra directamente Emalsa, en el recibo del agua potable, a base de una tasa por metro cúbico consumido.
El pasado enero la Junta de Gobierno municipal aprobó la creación de un "Comité Técnico Asesor para el análisis y definición, de las propuestas del documento elaborado por la consultora KPMG Abogados, S.L., de título Dossier de acuerdos y documentos para la adecuación de la situación de Emalsa". Por supuesto que a la ciudadanía la creación de este comité técnico, la consultora multinacional KPMG Abogados, S.L., y el título del dossier referido, le suenan a chino.
Pero conviene saber que este informe fue encargado y pagado por Emalsa, y que el actual grupo de gobierno municipal ha aceptado que "KPMG Abogados, S.L. haga el papel de mediador y garante de la legitimidad de los acuerdos a adoptar", según el acta de la Junta de Gobierno.
O sea que, en vez de valerse de los documentos e informes generados por los técnicos municipales en los dos últimos años, el Ayuntamiento acepta que un informe encargado por Emalsa y pagado por la misma sea la hoja de ruta a seguir, y de paso, que la multinacional juegue el papel de "mediador y garante". ¿No creen ustedes que cuanto menos es asombroso?
El "dossier de acuerdos" antes citado tiene una serie de propuestas o anexos cuyos titulares se recogen en el acta de la Junta. Entre ellos, cabe destacar el que trata de una "Nueva estructura de precios para los servicios del Ciclo Integral del Agua: tasa de depuración, tarifa del agua y la Ecotarifa". Otro anexo se refiere al "Contrato-Programa": inversiones y recuperación de costes mediante la Tarifa del Agua. Remuneración de los socios privados". El anexo nueve se dedica a "El pago de dividendos. La Retribución razonable a Emalsa".
Todo esto viene a cuento de la necesidad de crear una tasa por saneamiento (que ya nos anunció el alcalde en su charla). Eso de la "nueva estructura de precios referida a la tasa de depuración, la tarifa de agua y la Ecotarifa" me suena a que nos preparemos porque la subida del recibo del agua, tanto por el lado del agua potable como por la de depuración y la de saneamiento (ecotarifa), va a ser de antología. No conozco ningún anuncio de "nueva estructura de precios" que sea para bajar el precio.
Como lo de enlazar las inversiones que realice Emalsa y la recuperación de sus costes de inversión mediante la Tarifa del Agua. Vamos, que la multinacional no se corta un pelo en sus propuestas y como se ponga en marcha ese tándem inversiones-recuperación mediante tarifa del agua, el importe de la factura de la energía eléctrica va a ser un juego de niños al lado de la factura del agua. ¿Será casualidad que en este último anexo se haya añadido la frase "Remuneración de los socios privados"? Aunque la remuneración a los socios privados ya la pagamos todos los clientes de Emalsa, igual quieren que se incremente.
El anexo nueve habla del pago de dividendos a los socios privados y de la retribución razonable. Esto debe corresponder a los 88 millones de euros que los socios privados de Emalsa reclaman al Ayuntamiento por beneficios no obtenidos desde 1993 hasta la fecha.
Ahora entiendo por qué a los socios particulares de Emalsa les llaman "socios privados". ¡Yo también estaría "privado" con estas perspectivas! En cualquier caso, este artículo es un aviso a navegantes (en este caso a los ciudadanos). ¡La que se avecina?!
(*) Ex concejal del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.
