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Zigurat

Mafalda tenía razón

Qué es lo qué no quieren pagar? ¿Por qué no pagan como ciudadanos los servicios que ellos también disfrutan? ¿Y qué es la hacienda pública? una especie de oficina de Robin Hood, que quita a los que más tienen para darlo a los que menos tienen? ¿Es posible que tengan tantas necesidades que tienen que hurtar o robar o despistar o presuntamente evadir? ¿Para qué necesitan más de lo que pueden gastar, donar, prestar, legar? ¿Pagan los que más tienen, los que más cobran, los que más roban?

Desde que la gran auscultadora de la vida íntima de las personas se pone en funcionamiento a golpe de ratón, es imparable su difusión y ramificación mundial. Con poderosas herramientas sorprendentemente cualificadas y personal, el vídeo del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación explica en pocas palabras qué es lo que ha estado ocurriendo con esta ingente filtración de documentos, a cual más vergonzoso.

Los periodistas llevados por su desvelo de integridad -de tanto medio comprado, cuando no directamente dirigido por sus propietarios hacia sus intereses-, cansados y hartos de la mediocre política y las falsedades de tanto empresario o padre de la patria -hasta más de 20 jefes o exjefes de gobierno aparecen en la lista-, han tirado por los extremos y como ya pasó y está pasando con las filtraciones de Wikileaks, o las del Vaticano, han decidido publicar, con cuentagotas para que se digiera mejor, estos y otros asuntos que van contra el espíritu de solidaridad al que tanto apelan unos y otros. Porque alguno de los que tienen capital despistado al fisco español no es la primera vez que públicamente recriminan actitudes poco respetuosas a la gente que aún está en el desempleo, o en los desahucios o en las hipotecas abusivas o en el recorte de sanidad o en la educación y la cultura.

Muchos de las listas, de estas y de otras, están a sabiendas de que cometen delitos como es la evasión de capitales y el lavado del mismo, convirtiéndolo en prístino almíbar.

Por un lado tenemos que día sí día también aparecen en los medios de comunicación nuevas detenciones, nuevas imputaciones, nuevos investigados, por corrupción. Aquí se llevan la palma los políticos y en segundo lugar el laurel es para los empresarios, que solo saben explicar la recesión económica cuando merman sus ingresos, ganan menos dinero y encima piden una ley más percusiva con el trabajador. Y esta es la acepción que le da voz en el diccionario de la Real Academia: "Disminución de la actividad comercial e industrial que comporta un descenso de los salarios, de los beneficios y del empleo".

De los 11 millones de documentos producidos en unos 40 años, están conociéndose nombres y fortunas que avergüenzan a cualquiera, entre los dineros y los lavados especiales tenemos que los Documentos de Panamá, que abarcan un periodo desde los años 70 hasta hace muy poco tiempo, tácitamente revelan que algunas firmas con registro en paraísos fiscales han sido y están siendo utilizadas para el tráfico de armas y drogas o a la ya comentada evasión de impuestos.

Hay demasiada podredumbre en las conciencias, hay una relajación ética que se adapta a las circunstancias, que alimenta a esas circunstancias y que sigue creciendo a base de las mismas... y las circunstancias son las más favorables: un mundo en crisis, que es como decir que la política, la gobernanza no funciona y que la democracia está tocada hasta en los retretes donde se lavan las manos los que duermen en las calles.

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