La afición de Pablo Iglesias a poner ejemplos gráficos, para que los tontos ciudadanos nos enteremos de la situación actual, le ha llevado a decir recientemente que el partido socialista ha sido secuestrado en el país de Ciudadanos y, además, estos últimos le han quitado el pasaporte. Sólo les ha faltado decir que "los tontos socialistas", si alguien no les paga el rescate seguirán en el limbo ideológico donde los han colocado. La gran diatriba en que nos pone a todos el Sr. Iglesias no es otra que "conmigo o contra mí", es más, "o las bases me apoyan o me voy". ¿A dónde quiere ir ? O, lo que es peor, ¿dónde nos quiere llevar? Porque a ese sitio no creo que encuentre mucha gente que quiera acompañarle en ese viaje a lo desconocido o, más bien, al de la nueva versión de la República Bolivariana en España. Dicen que están haciendo cosas inéditas y dicen bien, ni ellos mismos saben qué camino tomar, si no, léanse sus principios programáticos de hace apenas un año y por dónde van en la metamorfosis ideológica. De esa crisálida, en vez de salir del capullo una mariposa multicolor, en cuanto a libertad de pensamiento se refiere, saldrá la auténtica quimera con siete cabezas porque siete son los que se presentan en comandita a todas las ruedas de prensa.
Esto se va pareciendo cada vez más a esos partidos de fútbol trabados en los que se dedican a marear la perdiz para ver si al final, con los futbolistas / ciudadanos ya cansados, en el último minuto marcan un gol de penalti. Ese país de Nunca Jamás al que Pablo Iglesias intenta llevarnos no es el sitio donde los españoles nos gustaría ir, máxime cuando los ciudadanos estamos hasta las narices de que nos tomen el pelo con un supuesto asalto al poder poniendo en peligro el orden constitucional establecido.
El país de Nunca Jamás es una lejana y exótica isla donde, al igual que en Podemos los niños no crecen y viven sin ninguna regla ni responsabilidad, pasando así la mayor parte del tiempo haciendo trampas al solitario y viviendo una aventura política detrás de otra. Aquí, los Niños Perdidos, estarían encabezados por Errejón, liderados por Pablo Pan y con su hada Colau. La población de dicha isla agrupa también a temibles filibusteros independentistas, indios, sirenas, hadas y demás criaturas que habitan en las aguas profundas de las selvas venezolanas. De acuerdo con la leyenda, si alguien desea llegar a Nunca Jamás deberá de volar hasta lo más alto del cielo y tomarlo por asalto, girar en la segunda estrella a la izquierda, de Izquierda Unida, volando hasta el amanecer. Creo que todos tenemos un pirata dentro de nosotros. Nos traslada a cuando éramos niños y queríamos ser piratas pero, una cosa es eso y otra bien distinta es lo que tiene que ver con la libertad, la rebelión y el sentimiento de no tener responsabilidades que, parece, es de lo que se trata.
