Un año más celebraremos el 9 de mayo el día de Europa. Quizás, un año más tampoco tenga o se le dé la importancia que merece. Los europeístas canarios queremos renovar el compromiso en esta fecha para impulsar la idea de convivencia ciudadana y respeto a los derechos que inspiró a los impulsores de la Unión tras la crisis de civilización que supuso la Segunda Guerra Mundial y reforzarnos en los valores de solidaridad entre los pueblos que la pusieron en marcha, y que en la actualidad, por desgracia, no son protagonistas del debate europeo.
Europa vive una gran crisis que afecta a sectores y aspectos fundamentales en el desarrollo de cualquier sistema. La económica, que dura muchos años y de la que debemos remontar con más fuerza y ayudando a todos los sectores sociales. La humanitaria, con la realidad de refugiados de la guerra Siria que buscan un lugar seguro para vivir y mejorar las condiciones sociales. La referida a valores y solidaridad entre los países que la conforman? Históricamente, de estas crisis Europa ha salido fortalecida, y ha sabido salir adelante con más fuerza, y eso debe ser una constante reclamación y exigencia a los gobernantes de los países y de la Unión.
Debemos y tenemos que ser críticos con la Unión Europea cuando se equivoca en la toma de decisiones o cuando no es lo suficientemente ágil en las mismas, no debemos olvidar que la UE ha construido un sistema de vida, desarrollo, progreso y protección de los ciudadanos que es modelo y referente mundial y que no tiene parangón global en ningún punto del mundo.
La Unión ha posibilitado que España durante los treinta años transcurridos desde nuestra incorporación tenga mejor desarrollo, más riqueza, un mejor marco de derechos esenciales y un lugar en el mundo más destacado. Y en concreto, Canarias, se ha visto doblemente reforzada en este progreso por la especial consideración que la Unión ha tenido con nuestras especiales dificultades para este desarrollo.
Es este el momento de recordar que las soluciones a la crisis económica, humanitaria, de valores, de protección social y de solidaridad sólo llegarán con más decisiones conjuntas, y alejándonos de las impulsadas aisladamente por los países. Tenemos que ser más solidarios en la ayuda a los demás, ayuda económica y de cooperación para resolver los problemas en el origen.
La actuación con mirada global del BCE ha ayudado a asentar las economías de los países más perjudicados por la crisis. La mirada conjunta de la Comisión para dar solución europea a las crisis citadas debe prevalecer sobre los intereses individuales y particulares de los países en cada una de las situaciones planteadas.
Tenemos la obligación de defender y potenciar estos valores fortaleciendo nuestra ciudadanía europea. En este día de Europa, hacemos un llamamiento para que de forma sencilla pero eficaz, tengamos unos minutos de reflexión, de diálogo en nuestros centros de trabajo, en nuestros hogares, en nuestras aulas y valoremos la realidad europea y seamos críticos con nuestro presente y el futuro de Europa, que es nuestro futuro.
Es nuestro país, Europa, multicultural, tolerante, diverso y además, unido por el mismo espíritu de libertad y progreso.
Situemos la bandera de Europa en todas las instituciones canarias como señal de que somos ciudades y ciudadanos europeos y que apostamos inequívocamente por un decidido apoyo a una Europa más solidaria, más generosa y más colectiva y reconozcamos la trascendencia que esta visión de la Unión ha tenido para nuestro desarrollo en estos treinta años y la que tendrá en el futuro en la solución a las difíciles circunstancias que vivimos.
Somos Europa, estamos en Europa y, en otras circunstancias, quizás seriamos refugiados?.
Secretario del Consejo Canario del Movimiento Europeo; vicepresidente europeo de la Asociación Europea de Enseñantes
