La broma les puede salir cara a cinco monitoras alemanas que organizaron la noche del martes un flashmob (acción callejera en grupo) que simulaba en Playa de Aro (Gerona) que dos famosos eran perseguidos por un grupo de paparazzis y fans en pleno centro de la localidad, donde había numerosas personas que frecuentaban terrazas o tiendas aún abiertas al público. Muchos turistas y vecinos creyeron que se trataba de un atentado terrorista y se produjeron escenas de pánico, con estampida de gente corriendo mientras se propagaba el rumor, sin fundamento, de que se estaban produciendo disparos. Hubo once heridos leves y muchos nervios. El titular del juzgado de instrucción número 3 de Sant Feliu de Guixols acordó dejar en libertad provisional, con cargos por desórdenes públicos, a las cinco monitoras, de entre 20 y 25 años. Debido a las carreras y las caídas seis personas fueron atendidas por contusiones leves y dos por ataques de ansiedad y otras tres fueron al hospital por contusiones. La Policía Local y los Mossos d'Esquadra tuvieron que hacer llamadas a la calma.
