Un atento lector de Escaleritas es buen conocedor del mapa escolar de Las Palmas de Gran Canaria con 68 centros públicos en una capital donde las distancias ya han cambiado y buena parte de los colegios están con la mitad de los estudiantes para los que fueron diseñados. ¿Quién abre el debate? ¿No es una forma de ahorrar una fusión de centros? ¿No se mejoran la calidad y los servicios? Hacen falta criterios claros. Dicho queda.