¿A quién no le gustaría tener un sueldo para toda la vida? A Ángela de Sande sí, desde luego. Y tuvo suerte. La mujer, de Palma, recibió en su casa dos tazas rojas y un sueldo vitalicio de Nescafé en 2008. Desde entonces, ha estado cobrando 1.520 euros brutos al mes. Durante cinco años, además, cobró un subsidio de desempleo para mayores de 52 años. Ahora, una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Baleares determina que la mujer no tiene derecho al subsidio cobrando el "sueldo Nescafé". Pero el tema va más allá. No sólo no puede recibir la ayuda, sino que además tendrá que devolver el dinero que recibió irregularmente: 17.054 euros. Ángela de Sande se había quedado en paro y estuvo cobrando la prestación de desempleo. No ocultó que percibía el sueldo vitalicio. Así cobró el paro hasta que en 2014 se detectó el error y el Servicio de Empleo Estatal presentó una demanda. El "sueldo Nescafé" de 1.520 euros supera en un 75% el Salario Mínimo. Por tanto, según la sentencia, a la que tuvo acceso La Vanguardia no tenía derecho al subsidio y deberá devolver el dinero.