La Provincia - Diario de Las Palmas

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S. Filarmónica

Isabel Rey y la Orquesta del Atlántico

Sabido es que Mahler destruyó sus obras instrumentales de cámara, de las que solo ha sobrevivido el primer movimiento de un Cuarteto en sol menor para piano y cuerdas, escrito a los 16 años. No fue un rechazo del género, sino la incorporación a las sinfonías y canciones orquestales de ideas y texturas camerísticas en relación óptima con el formato sinfónico. De ahí la doble evidencia de que hizo cámara cuando lo creyó necesario y que la instrumentación de los grandes tutti es estructural, nunca optativa. El equilibrio de los volúmenes sonoros, selectivos o densos, es precisamente una de las aportaciones mahlerianas a la culminación del concepto posromántico y la decisiva apertura a la orquesta del siglo XX.

Las reescrituras de Riderelli se sostienen en el Adagietto de la Quinta Sinfonía (cuerdas solas) y las Kindertotenlieder, pero desnaturalizan las sinfonías, limitadas en el caso de la Cuarta a un quinteto de arcos y un sexteto de madera y metal, con arpa, piano y percusiones. La descarnada versión que escuchamos no solo delata pobreza, desequilibrio y monotonía -achacables al versionador- sino su discutible oportunidad allí donde la música propiamente sinfónica es rica y constante, como ocurre en Canarias. Los buenos instrumentistas de la sección de cámara de la Orquesta del Atlántico y la voluntad de la directora, Isabel Costes, tienen a su alcance un inmenso repertorio de cámara barroco, clásico, romántico y contemporáneo. Lo mejor de la versión fue el canto refinado y la muy bella voz de la soprano Isabel Rey en el wunderhornlied La vida celestial del movimiento final.

En ese repertorio figura por derecho propio el Noneto de Nino Rota que abrió la sesión. El entrañable creador de bandas sonoras del mejor cine italiano sonó en toda su autenticidad, popular, depurada y directa, con ritmos bien batidos y acentuados, sencillas melodías declamadas en su estilo, impecable equilibrio sonoro, variado color y alta competencia en las complejidades de las variaciones finales.

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