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Javier Durán

Reseteando

Javier Durán

Hollande y el fútbol golfo

No imagino a Rajoy lanzando la puntita de que los jugadores de fútbol deben ejercitar más "el músculo del cerebro". Impensable que tal afirmación, pronunciada por el presidente francés Hollande, pueda pasar de largo en España, donde la idolatría en torno a los que le pegan patadas al balón va camino de ser una religión monoteísta. El socialista galo lo dice en el libro Un presidente no debería decir eso, escrito por dos periodistas de Le Monde, a cuento, entre otros, de Benzema, acusado de presunto chantaje a un compañero por un vídeo porno. El best seller de revelaciones presidenciales, un género de uso excepcional por parte de un presidente en mandato, ha provocado por lo del jugador madridista y otras cuestiones una polvareda de cuidado entre los galos. En nuestro país hubiese sido mayor, porque las golferías y conductas atípicas de estos archimillonarios suelen ser vistas de forma condescendiente, es decir, sólo interesa el triunfo y poco importa el impacto mediático de las salidas de tiesto. Como no podía se de otra manera, el entrenador Zinedine Zidane y el colega Raphael Varane, el primero muy comedido, han salido en defensa de la moralidad que echa de menos Hollande. Y el caso es que, siguiendo al mandatario, es muy cierto que estas figuras prominentes de los estadios, astros de una época donde el fútbol mueve y desorbita masas, deberían ofrecer a sus seguidores más comportamientos ejemplares, y no creerse que tienen inmunidad para conducir sin carné, para no llevar puesto el cinturón de seguridad, para ser protagonistas de un vídeo de contenido sexual con una joven que acaba siendo distribuido en las redes sociales, para utilizar la picaresca y no pagar a Hacienda... Claro que no todos son iguales, pero aquí nos referimos a los que no ejercitan los músculos del cerebro, a los que no son conscientes, por ejemplo, de que tras los pedestales sobre los que están hay una violencia que suele perder los estribos y que tiene por ritual intentarlo cada vez que puede.

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