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La que se avecina

El Reino Desunido

Puede que el hasta ahora llamado Reino Unido deba cambiar de nombre. No sólo se desune de la UE, sino también de si mismo: Escocia casi seguro (Nicola Sturgeon, la primera ministra y líder del SNP, partido nacionalista escocés, ya pide un nuevo referéndum), y quizá Irlanda del Norte, quieran irse del RU (llamémosle aún así, mientras le quede Gales) y permanecer en la UE? que esperemos no se desuna también. Porque el Brexit traerá -qué duda cabe- cola. Francia, muy "alepenada", intentará un Frexit, más antes que tarde; y otros amenazan con seguirla.

En política

En política, en el RU gobierna al Partido Conservador: Theresa May --Thatcheresa May-- neoliberal, equiparable, digamos, a nuestro PP sin (por ahora, nunca se sabe) corrupción. La oposición es un algo alicaído en votos Partido Laborista. Pero la diferencia notable con España, es que ese Partido Laborista está dirigido ahora por la extrema izquierda de Jeremy Corbyn, marxista de 66 años (aunque apoyado por una ola juvenil), el equivalente a nuestro Podemos. Es como si Podemos estuviera dentro del PSOE y mandara en él.

En el RU la izquierda está unida dentro del Labour Party. Es una unión difícil; la intensa guerra interna contra Corbyn ha durado un año --desde que fuera elegido-- jaleada por parlamentarios electos y hasta miembros de su gabinete en la sombra. Hizo daño, pero Corbyn volvió a ganar. Nuevamente la fuerza de los sindicatos más el aluvión de miles de nuevos jóvenes afiliados le dio la victoria.

Y ahora Corbyn está en control; ha nombrado un nuevo gabinete en la sombra, sin problemas esta vez. Lo dice Rafael Behr en The Guardian ("Jeremy Corbyn's mandate is unarguable. This reshuffle is the proof" El mandato de Corbyn es indiscutible. El cambio de gabinete es la prueba; octubre 7, 2016): "Ha llevado un año de caos para que el mensaje finalmente llegara a destino: éste es el partido de Corbyn ahora, y triunfará o fracasará en sus términos".

De entre los muertos

Surge entonces en el horizonte Tony Blair; cadáver político si los hay. Pese al Chilcot report (encargado por el ex premier Gordon Brown y hecho público hace poco), informe demoledor que dejó su reputación por los suelos o aun más abajo; su instinto político es tan fuerte que le hace ver el vacío a la derecha de Corbyn. Y allí se quiere lanzar.

Tiene cara. Después de haber engañado a su país y al mundo con la desastrosa invasión a Irak, mintiendo descaradamente inexistentes armas de destrucción masiva, amenaza con volver a la lucha e intentar ahora derrotar a Corbyn en el Labour Party. Si lo intenta ¡Buena suerte! Esperemos que, cómo los militares argentinos en las Malvinas, salga segundo, y Corbyn quede en control de la oposición. Corbyn será de izquierdas, será un "podemita", pero Blair es impresentable.

Es curioso como en España Felipito Tacatún Gonzalez toma las armas contra Podemos y en el RU, Blair --otro reciclado comparable a él pero peor-- hace lo mismo. "El Enmascarado Solitario no se Rinde". La derecha, los mercados, los grandes capitales, no se rinden, e intentan penetrar la llamada izquierda.

Pese a ello en el RU va triunfando --dentro del Labour Party-- la versión Podemos, la más "de izquierda"; y allí el laborismo es opción de gobierno. En España, la izquierda dividida, como siempre, pierde terreno.

Lo que debe enfrentar Theresa May es complicado. En lo interno, Nicola Sturgeon -Escocia-- jaquea con un nuevo referéndum de desunión. Lo puede hacer -y ganar- en cualquier momento. En lo externo debe enfrentarse a una obra maestra del horror: el Brexit y su --larga y muy pero muy complicada-- implementación. Además, pesa en muchos la duda si finalmente se hará, o se impondrá el common sense, el sentido común, y se repetirá el referendo -no sería la primera vez-anulando el incómodo, complicado y "perdedor" Brexit. El futuro dirá. Pero en el presente May -que votó contra el Brexit-- hace los deberes y sigue implementándolo.

¡Dios Salve al Reino (Unido o no, masoquista o no)!

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