Un amable lector nos hace llegar su desencanto por el sufrimiento que padece cada vez que abandona la capital para ir al campo. "Don Fernando, tanto lío por ver qué empresa se encarga del mantenimiento de las carreteras pequeñas y al final vamos a tener que licitar los conductores el mantenimiento de nuestros coches", nos dice. Ahora que las lluvias han pasado es buen momento para llamar al orden a los encargados de las vías.