Esta era de internet que tantas cosas nuevas nos ha traído es proclive a la difusión masiva de bulos. En los últimos días circula por Whatsapp de forma viral por todo el país la foto de una niña de cinco años presuntamente desaparecida en el madrileño parque de El Retiro. La niña, que dice el texto que se llama Xiomara, pasaba unos días en la capital con sus padres cuando fue "robada". Los constructores de fakes, como se denomina en inglés a las falsedades, no tienen escrúpulos. En este caso, añaden hasta foto de la niña y afirman que es de Bella Vista. Aunque no especifica la provincia, de inmediato quien lo recibe busca Bella Vista en el mapa de su zona y encuentra algún lugar próximo con este nombre. Así da pábulo a la mentira y cae en la trampa de reenviar el mensaje a todos los contactos, como se pide en el whatsapp. De este modo, la historia se viraliza en pocas horas. Por tres vías he recibido el fake en menos de 24 horas y en uno de ellos le han pixelado los ojos a la niña. De risa. Me pregunto qué se gana construyendo estas falsedades para hacer que el prójimo se moleste en difundirlas.
