Una juez de Madrid ordenó la exhumación del cadáver del pintor Salvador Dalí y la obtención de muestras de su cuerpo para la práctica de la prueba biológica de determinación de la paternidad de Pilar Abel, una vecina de Figueres que presentó una demanda para ser reconocida como hija del artista. Según la juez encargada del caso, "es necesaria la prueba biológica de investigación de la paternidad", al "no existir restos biológicos ni objetos personales sobre los cuales practicar la prueba por el Instituto Nacional de Toxicología". Abel dijo ayer que "el ADN dirá la verdad" y mostró su satisfacción por lo que entiende que es un reconocimiento a su "lucha" después de una década de demandas. "Quiero saber quién soy", dijo. La Fundación Gala Dalí anunció que recurrirá la decisión judicial.

La demanda presentada por Pilar Abel, nacida en Figueres en 1956, alega que fue fruto de una relación que mantuvo su madre con el pintor catalán, a quien conoció en Cadaqués (Gerona) cuando trabajaba con empleada de una familia que pasaba temporadas en esa población.