A la hora de elegir un lugar para pasar unos días de vacaciones, la gastronomía es un elemento tan importante como lo es la ubicación del hotel. Por ello, la oferta turística de Lopesan trabaja, con especial interés, el "buen comer" de sus clientes. Junto a la habitación o la piscina, el restaurante o el bar del hotel o sus alrededores es el segundo espacio donde los clientes pasan más tiempo.

Con una propuesta gourmet amplia, moderna, variada y capaz de satisfacer cualquier expectativa del cliente, la exclusiva zona turística de Meloneras se ha convertido en destino turístico gastronómico de primer nivel. Carnes, pescados frescos, mariscos y una variada oferta de comida internacional son los protagonistas del entorno inmediato que rodea a los hoteles de Lopesan Hotel Group en el sur de Gran Canaria.

En la zona ajardinada del emblemático hotel Lopesan Costa Meloneras se encuentra el Restaurante La Toscana, cuyo menú se centra en los sabores típicos de la cocina italiana. Con un diseño espectacular, La Toscana es una apuesta ganadora para los amantes de la pasta fresca y las pizzas, sus platos principales. Una cocina puesta al día con sabores reconocibles y que se identifica con la dieta mediterránea.

El asador de carne argentina El Churrasco y el restaurante Las Rías, especializado en arroces y mariscos, así como el nuevo restaurante Café del Mar, que sigue la estela de su homólogo en Ibiza y además incluye un variado cabaret que ameniza las experiencias culinarias nocturnas, completan los restaurantes a la carta que rodean al Lopesan Costa Meloneras.

Comer en Plaza Mayor es otra acertada elección para los amantes de la buena carne que pasan por Meloneras. Ubicado en el corazón del hotel Lopesan Villa del Conde, su plato estrella es el chuletón y su preparación al carbón de encina permite mantener el auténtico sabor de la carne. Entrantes del país como los espárragos blancos, cogollos de Tudela o anchoas son otras de sus suculentas propuestas.

Como no podía ser de otra manera, el Lopesan Baobab Resort, de temática africana, presume de tener el único restaurante de cocina africana de Canarias. Ákara, cuyo nombre hace referencia a una receta africana, trae los sabores más autóctonos del continente vecino a través de su menú degustación que apuesta por la originalidad de sus platos exóticos, como son la sopa de sésamo con gallina, seguido de cocodrilo marinado y frito con ensalada de hierbas y cardamomo, finalizando con un toque dulce de mousse de chocolate de Guinea y chía, sopa de yogur y fruta de la pasión.