2017 se plantea como el año de la recuperación económica. Ya se ha cumplido un trimestre de un año que arrancaba con buenas expectativas. ¿Qué balance hace?

Hemos cerrado el año 2016 con datos de crecimiento y empleo por encima de las expectativas que teníamos para un año que se preveía complicado.

2016 ha sido el primer año desde la crisis en el que todos los sectores económicos han cerrado en positivo por primera vez desde la crisis, incluso el sector de la construcción, que empieza a dinamizarse. Todo indica, y esto no estaba previsto, que en el primer trimestre de 2017 se ha vuelto a acelerar el crecimiento económico. El excelente comportamiento del empleo nos vuelve a situar de nuevo en crecimiento por encima del +3%.A pesar de que se comienzan a corregir al alza las estimaciones de crecimiento para 2017, es prudente mantener que cerraremos este año con un crecimiento ligeramente superior al +2,5%. Seguiremos liderando el crecimiento económico de la unión europea, aunque esperamos una leve desaceleración del crecimiento del PIB a lo largo de 2017. Canarias se moverá en línea con la economía nacional. Del esfuerzo que hagamos en nuestra comunidad dependerá que aprovechemos más o menos la coyuntura favorable para crecer y facilitar inversiones que generen empleo.

¿En qué sectores cree que se aprecia más claramente que canarias está saliendo de la crisis?

El motor económico de canarias es el turismo. Es el gran dinamizador de nuestra economía, sobre el que recae una buena parte de la responsabilidad de generar empleo y recursos económicos para sostener los servicios públicos esenciales de nuestra comunidad.

La dimensión del sector turístico y su liderazgo internacional en el segmento de sol y playa facilita el crecimiento de sectores de apoyo que van teniendo identidad propia que les facilita crecer e internacionalizarse y por tanto diversifican nuestra economía.

Ese es el caso de sectores como el automóvil, la industria agroalimentaria, la digitalización empresarial, la consultoría estratégica, la logística, el cine, etc.

La salida de la crisis en lo primero que se nota es en la predisposición a emprender, en la puesta en marcha de proyectos de inversión. Eso notamos que se está produciendo con intensidad, pero también notamos que el marco legal del que nos hemos dotado en los últimos años puede frustrar una buena parte de los proyectos de inversión que se plantean, y eso supone poner límites a la generación de empleo en Canarias.

¿Qué previsiones de crecimiento han fijado para este año?

El crecimiento económico en canarias es muy probable que se encuentre de nuevo en 2017 en el entorno del +3%, pero debemos ser conscientes que el crecimiento económico en las islas depende en mayor medida que en territorios continentales de tener un marco más o menos favorable a la actividad económica en la región.

La búsqueda de acuerdes con el gobierno de España respecto a nuestro REF y modelo de financiación, así como la actividad legislativa desarrollada en nuestro parlamento en beneficio de la actividad económica, liderada por el presidente Clavijo, colocarán a canarias en una mejor posición para atraer inversiones y generar empleo.

¿Qué particularidades presenta canarias y que sectores, desde su punto de vista, no están siendo lo suficientemente atendidos por el gobierno para apoyar su crecimiento?

En Canarias necesitamos un cambio de mentalidad, necesitamos que la actividad económica se perciba como el camino que debemos recorrer para generar empleo.

Ese cambio se está produciendo después de dos décadas en las que la actividad económica ha sido considerada como un mal necesario al que se le debía poner freno. Sin discutir ningún aspecto de la legislación europea, y por supuesto española y canaria, de respeto y protección del medioambiente, no debe existir ninguna norma que perjudique la actividad económica y de la que no se conozca el impacto económico que genera. Hemos sido irresponsables en la legislación que hemos producido y que tanto daño ha hecho a la actividad económica, contribuyendo a que tengamos altísimas tasas de desempleo y una baja actitud emprendedora. ¡Estamos reaccionando!

¿Cuál es la receta para aprovechar este repunte económico que se está produciendo tras una crisis tan severa como la vivida? Se lo digo por si cree que debemos aprender para no volver a repetir los fallos cometidos en el pasado.

La sociedad ha tomado nota de los errores y aciertos del pasado. Vivimos en una región privilegiada de la unión europea. Nuestros fueros fiscales y el estatus de región ultraperiférica nos dan la oportunidad de vivir con estándares europeos mediante nuestra propia actividad económica. Nuestro compromiso y nuestra responsabilidad es utilizar las potentes herramientas de las que disponemos, adoptando con cuantas medidas internas sean necesarias para potenciar sus efectos y obtener los resultados que todos esperados, especialmente en empleo. La mejor receta es formarnos mucho, viajar mucho y tener la mejor actitud frente a la actividad económica y la emprendiduría.

¿Cree que esta crisis que superamos ha generado una desafección por parte de la sociedad hacia el sector empresarial? Declaraciones de algunos dirigentes sobre asuntos sensibles como abaratar aún más los despidos no han sentado demasiado bien entre una ciudadanía desencantada con el empresario y la clase política.

La crisis ha sido dramática, con efectos devastadores sobre el tejido empresarial que se han trasladado de forma directa e inmediata sobre las personas. Esa dura realidad ha causado desafección hacia prácticamente todas las instituciones u organizaciones tanto públicas como privadas. Afortunadamente España ha tenido capacidad de reacción y su actuación es admirada por el resto de Europa, especialmente por países de gran peso como Francia e Italia que no han conseguido acometer las reformas necesarias para volver a la senda del crecimiento y la competitividad con la fuerza que lo está haciendo España. Ahora toca trabajar y aprovechar las oportunidades que tenemos delante gracias al esfuerzo colectivo que hemos realizado. Poco a poco iremos olvidando discursos populistas que proponen caminos que nunca han conducido a al crecimiento económico o a la generación de empleo. Entre 1980-2016 (40 años) la tasa media de paro en España ha sido del 15%, frente al 6% en usa y el 5% en los 7 países más ricos de la UE (sin incluir a España). En Alemania, la media de incremento salarial en los diez últimos años (2006-2016) ha sido del +0,8%, y en 2016 del +1,8%, con una tasa de paro del 3,8%. Es verdad que los salarios son más altos en Alemania, parte importante de que esto ocurra es que los salarios crecen poco, hay poco paro, y por tanto el paro ejerce poca presión a la baja de los salarios a la vez que fomenta la formación.

La moderación salarial pactada por organizaciones empresariales y sindicales en España en los últimos años, no anticipándonos con subidas salariales por encima de lo que podemos permitirnos, ha evitado desempleo y caída de salarios.

De igual modo le pregunto sobre ¿qué carencias del empleado han provocado también que muchos de ellos no puedan recolocarse en el mundo laboral?

No podemos culpar a los trabajadores de las dificultades que tienen para encontrar oportunidades en el mundo laboral.

Estamos ante un fracaso colectivo que solo se resuelve con educación y formación a disposición de todos, independientemente de la renta o del ámbito geográfico en el que viva. Los planes de educación y formación deben ser tan ambiciosos como los recursos destinados a paliar las necesidades de las personas que no consiguen superar la crisis.

¿En qué situación está el sector de la construcción?

El sector de la construcción se ha llevado la peor parte de la crisis económica, con graves consecuencias para la mano de obra que empleaba. Afortunadamente la construcción residencial está recuperando actividad, y si ésta se consolida, sus efectos sobre el crecimiento económico y el empleo van a ser muy importantes. El número de licencias y contratos de obra residencial aumentan de forma considerable. Ya en 2016 se obtuvieron unas 60.000 licencias, frente a las 700.000 que teníamos en los años de la burbuja. La cifra de equilibrio en España debe estar en torno a 150.000 licencias por año. Es irreal hablar de nuevo de burbuja tratando de frenar un sector que debe absorber todavía una cantidad muy importante de mano de obra que no está formada para otras actividades.

Por último, ¿dónde cree que existen nichos de negocio en nuestras islas que aún pueden generar riqueza y no están lo suficientemente explotados?

La mejor forma de descubrir nichos de negocio es fomentar la actividad económica. Corresponde a los empresarios detectar los nichos de negocio en beneficio de la diversificación económica y el empleo. El papel de las administraciones públicas es sencillo, no hay más que seguir las recomendaciones de la unión europea: "ninguna norma debe perjudicar la actividad económica, especialmente la de las pymes.