La cartelera salta también hasta el continente asiático con una comedia de humor negro y ligero que firma el cineasta japonés Yoji Yamada, también director de Una familia de Tokio (2013). En esta nueva película, planteada a modo de secuela bajo el título Maravillosa familia de Tokio, el caos se desata cuando los tres hijos de una pareja, que está a punto de celebrar su 50º aniversario de boda, descubren que su madre ha decidido pedir el divorcio. La película compitió en la Sección Oficial del Festival Internacional de Cine de Valladolid (Seminci).