Dice Alejandro Pelayo, la mitad de Marlango, que "a lo largo de estos años hemos moldeado la banda a los diferentes espacios y escenarios donde hemos tocado, desde festivales, hasta teatros o salas más pequeñas, pero, curiosamente, nunca habíamos abordado el formato con el que empezamos a trabajar las canciones, que es a piano y voz, la esencia de Marlango".

Pelayo y Leonor Watling se dejan caer hoy viernes por en la Sala Jerónimo Saavedra del Auditorio Alfredo Kraus en la capital grancanaria, agitando el repertorio de El porvenir, el séptimo álbum que ha facturado Marlango desde que presentaran sus credenciales en 2004 con un disco de debut de título homónimo. Con el repertorio de esta última referencia, de la que van agotando fechas de la gira y con un nuevo trabajo en el horizonte, el concierto en el Alfredo Kraus se presta a incorporar canciones de una producción de estructura pop barnizada de jazz. Lo que comenzó como divertimento sin más pretensiones profesionales de cara al futuro, ha crecido muy por encima de las posibilidades que tenían depositados sus protagonistas.

Como bien reflexionaba Alejandro Pelayo a R@dar en una entrevista, de nada vale hacer planes en la música, porque en este negocio son las canciones -y el público que las hace suyas- las que marcan la hoja de ruta.