-¿Hasta qué punto ha perjudicado a España el que aquí no se implantara el protestantismo?

-Nos ha perjudicado en una mentalidad que aún hoy estamos arrastrando. Aunque las cuestiones filosóficas estén en su base, el que la reforma no se centrase en España influyó en muchos aspectos políticos. España se puso al lado de Trento.

- ¿Fue realmente importante el protestantismo para la nueva mentalidad europea?

-Fue transformador de la Europa moderna. Todo parte de que Martín Lutero descubre la Biblia. La gente no leía y la reforma hizo a la gente más instruida. La filosofía se transformó en teológica y repercutió en unas características como son la lucha por la libertad de conciencia. Todos eran hijos de la época medieval, pero hay algo que diferencia al protestantismo y es la reflexión sobre La Biblia.

- ¿De qué parte la creencia?

- Parte de que Dios tiene un mensaje para cada ser humano y cada ser humano tiene que poder acercarse a Dios por medio de la Biblia y eso hace que cada uno sea importante. La esencia era así. Pero en el católico hay un miedo a entender que el ser humano llegue a conclusiones acertadas, y hay que tutelarlo, es entender que el ser humano nunca puede ser adulto.

-¿En qué aspecto en concreto se pueda notar, en la sociedad española, la ausencia de una reforma protestante?

- Los países protestantes tienen mucho respeto por las minorías. Pero en España creemos que las minorías no tienen razón.

-¿Y el que España fuera el paladín del catolicismo repercutió aún más negativamente?

-Las tesis de España tenían mucho peso, primero en Trento y luego en el Vaticano. Pero nosotros estamos por detrás de Europa por muchas razones. Hay que recordar que durante el franquismo vivimos en una burbuja mientras el mundo se estaba transformando. Ahora estamos recuperando lo que a otros les costó un siglo y medio en democracia. No hay más que ver los debates que hay en política.

-Y supongo que la influencia española en Latinoamérica sería también determinante.

-Fue aún peor porque en España al menos entró el luteranismo, aunque luego se cortaron sus iniciativas. Pero en América no se puede rastrear nada hasta los movimientos de liberación del XIX. Sí es cierto, exportamos este sistema a Latinoamérica, la confesionalidad del Estado, la moral católica, etc.

-¿Es el capitalismo una consecuencia del protestantismo?

- Max Weber en su famosísimo libro La ética protestante, señala que el primer capitalismo no fue tan feroz, ya que en la esencia del capitalismo hay una ética de que deben hacerse las cosas bien porque hay un Dios que nos ve, hay que ejecutar bien el trabajo y hay un concepto del ahorro. Para Weber hay una ética protestante en el primer capitalismo que luego se perdería al derivar en la acumulación, etc.