Los centros universitarios españoles están a la cola de Europa en la captación de recursos procedentes de la empresa privada para investigación. Este dato, aportado ayer por el rector de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, José Regidor, en la inauguración en Arrecife de las Jornadas de Presidentes y Secretarios de Consejos Sociales de las Universidades Públicas (días 19 y 20), ayuda a calcular la profundidad del abismo que media entre los lugares donde se cuece el conocimiento y la economía del día a día. El encuentro de Lanzarote está programado para debatir sobre el papel que puede y debe desempeñar la universidad española frente a la crisis económica desde una doble perspectiva: el desafío actual de voltear la situación y la oportunidad de futuro para cambiar las estructuras productivas.

"Debemos jugar un papel primordial de transferencia de conocimientos entre las facultades y las empresas y llevar a cabo también una labor cada vez más importante en los departamentos de investigación y desarrollo de estas empresas", apuntó el presidente de la Conferencia de Consejos Sociales de las Universidades Públicas, Joaquín Moya, en el transcurso de un acto celebrado en el salón de actos del Cabildo de Lanzarote.

"¿Cómo pueden ayudar las universidades a superar la crisis?" Lothar Siemens, presidente del Consejo Social de la ULPGC, entiende que plantearse esta pregunta es obligado para la universidad en estos momentos. "Debemos atender las demandas de un mundo cambiante y globalizado y donde el conocimiento se ha convertido en un factor primordial para el avance económico y social", destacó Siemens.

"Como universidades públicas tenemos una responsabilidad muy importante", insistió Regidor. "Tenemos que dar respuesta a la situación que se nos está planteando. Debemos interrogarnos sobre hacia dónde ir y qué profesionales queremos formar y para qué los estamos formando", recalcó. "Debemos definir nuestro futuro, porque en España no podemos seguir basando nuestra riqueza en los mismo elementos que hasta ahora. Se ha creado un Ministerio de Innovación, pero no hay innovación si los conocimientos que se crean no se ponen en valor y no se crean empresas", advirtió. "Es necesario", agregó, "contar con herramientas para que esa innovación se pueda producir".

La consejera de Educación, Universidades, Cultura y deportes del Gobierno canario, Milagros Luis Brito, aseguró que pese al descenso presupuestario de cara a 2010 "queremos que las universidades canarias sigan creciendo" y que por ello se ha renovado el contrato-programa hasta 2013, aunque recortando la subida prevista de la inversión del 4,5 al 4,2.