Las infecciones por el virus VIH disminuyeron en los últimos ocho años un 17 por ciento, por lo que la epidemia del sida está retrocediendo, informó ayer la agencia de Naciones Unidas para el Sida (Onusida). En su informe anual sobre la enfermedad, Onusida que revela que el retroceso se debe sobre todo al descenso de las infecciones en África subsahariana (15 por ciento).

Sólo en 2008, en esa región hubo 400.000 infecciones menos que hace ocho años, pero 22,4 millones de personas siguen conviviendo con el virus.

"La buena noticia es que tenemos pruebas de que el descenso que estamos viendo (en muchas regiones) se debe, en parte, a la prevención contra el virus VIH", dijo Michel Sidibé, director ejecutivo de Onusida. En total, en 2008, 33,4 millones de personas tenían el virus del sida.

Ese mismo año se registraron 2,7 millones de nuevas infecciones, y dos millones de fallecimientos, según el informe. En 2008 aproximadamente 430.000 niños nacieron con el VIH, con lo que se elevó a 2,1 millones el número de menores de 15 años que portan el virus.

África subsahariana sigue siendo el área más castigada por el VIH, ya que concentra más de dos tercios (67%) de las personas con el virus, casi tres cuartos (72%) de las defunciones relacionadas con el sida y el 91% de todas las nuevas infecciones entre niños. Asimismo, en esa región la epidemia ha dejado a más de 14 millones de menores huérfanos.

En Asia oriental las nuevas infecciones disminuyeron casi un 25% y en Asia meridional y sudoriental un 10%. En total en Asia, segunda región con mayor número de enfermos, residen 4,7 millones de personas con el virus. En el Caribe padecen la enfermedad 240.000 personas, pero es la zona, después de África subsahariana, con una mayor prevalencia (1%).

En Europa Oriental y Asia Central, después de un aumento drástico del número de infecciones nuevas entre quienes utilizan drogas inyectables, la epidemia se ha estabilizado considerablemente.

No obstante, el número de adultos y niños con el VIH ascendió a 1,5 millones en 2008, lo que representa un aumento del 66 por ciento de los 900.000 registrados en 2001. En América Latina la prevalencia de la epidemia de sida se mantiene estable (0,6%) a pesar de que ha habido un incremento de casos en los últimos ocho años.

En 2001, en la región vivían 1,6 millones de personas con el virus del sida, mientras en el 2008 esta cifra ha aumentado a 2 millones.

En América del Norte (1,4 millones afectados) y Europa Occidental y Central (850.000 infectados) la enfermedad se concentra en poblaciones clave que corren mayor riesgo, como homosexuales o personas que se inyectan drogas.

Por otra parte, en Oriente Medio y África del Norte, el número de personas que viven con el virus VIH pasó de 200.000 a 310.000 entre 2001 y 2008, destaca la agencia de Naciones Unidas para el Sida con respecto a la incidencia de la epidemia.