Un tribunal neozelandés ha condenado a una mujer de 22 años por cobrar fraudulentamente ayudas del Estado como madre soltera, tras comprobarse en páginas sociales de internet que convivía con el padre de su hijo.

La mujer, identificada como Lauren Kaney, cobraba una ayuda social mensual de 480 dólares neozelandeses (273 dólares ó 205 euros) al declarar a las autoridades que era madre soltera.

Sin embargo, los investigadores del Gobierno encontraron en páginas de "Bebo" y "Facebook" que la madre de un crío de dos años mantenía aún relaciones con el padre, lo que la hacía beneficiaria de una ayuda de sólo 140 dólares neozelandeses (80 dólares ó 60 euros) mensuales.

Según declaró la joven al diario "NZHerald", el fisco tras recibir una denuncia anónima miró "en mi página de Bebo. Me llevé una gran sorpresa cuando me pillaron. Nunca pensé que me investigarían de esa manera. No es justo que hagan eso, aunque tampoco es justo que yo los haya timado en primer lugar".

El caso es conocido como el "efecto capullo", la creencia por parte de la población de que lo que publican en las páginas de internet no estará al alcance de todos.

La mujer, que cobró ayudas de más por 17.500 dólares locales (9.966 dólares ó 7.498 euros) fue condenada a una pena de cuatro meses de arresto domiciliario y a 200 horas de trabajos comunitarios.