Con nuevas vías de administración, menos efectos adversos, más potentes y contra nuevas enfermedades. Estas son las tendencias en la investigación vacunológica de la que ayer hablaron los especialistas que participaron en las X Jornadas Científicas de Actualización en Vacunas, organizadas por el Servicio de Epidemiología y Prevención de la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad autonómica.

Las vacunas del futuro caminan en la dirección de buscar nuevas alternativas en la administración actual al mismo tiempo que ser menos reactivas y más inmunógenas, según explicó ayer Amós García Rojas, jefe de Sección de Epidemiología y Prevención en Las Palmas del departamento de Salud Pública. "Se trata de facilitar la administración al paciente", explicó el especialista, coordinador del foro científico.

Las líneas de investigación a corto plazo señalan las vacunas de dispensación intranasal e intradérmica como las novedades. "En Estados Unidos existe una antigripal intranasal", explicó García Rojas.

Hasta ahora es la subcutánea la vía de administración más generalizada pero también las investigaciones buscan poder colocar estos fármacos por vía intradérmica.

Aunque la seguridad en las vacunas es cada vez más alta, con escasas reacciones y efectos secundarios, las investigaciones también persiguen mejorar esta capacidad. "Se sabe que el riesgo en medicina no puede reducirse a cero. Pero hay que seguir trabajando para aminorar la posibilidad de efectos no deseados en los pacientes".

En esa misma línea, la potencia inmunológica de algunos preparados, como los antigripales, también se pretende aumentar para incrementar la efectividad de la vacuna, otra de las líneas de investigación actuales en Vacunología.