La Restinga ya ha comenzado a convertirse en un pueblo fantasma ante la amenaza que supone para la población una erupción volcánica submarina que se acerca a las costas de El Hierro y por lo tanto a aguas más someras. Se trata de un hecho constatado por los vulcanólogos del Instituto Geográfico Nacional (IGN) y que obligó a encender el semáforo rojo en la localidad.Pasadas las cuatro y media de la tarde partió desde el pueblo una guagua con alrededor de ochenta personas en su interior. Se trata de aquellas que no tienen la posibilidad de alojarse en viviendas de otros familiares y que por lo tanto serán trasladados a la residencia de estudiantes de Valverde, aunque también están preparados los polideportivos de la capital insular y de San Andrés.

Pero el lento goteo para el vaciado de una localidad en la que no dormirá nadie esta noche había comenzado a las dos de la tarde con la activación del semáforo rojo para el pueblo de La Restinga, momento a partir del cual comenzó un lento para imparable proceso de evacuación con destino en primera instancia al campo de fútbol de El Pinar. En cualquier caso, la mayor parte de los vecinos de La Restinga (una población de alrededor de quinientos habitantes) ha decidido realojarse en viviendas de familiares, preferentemente en el pueblo de El Pinar, pero también en Valverde o en El Golfo (Frontera). El desalojo se produce además mientras los vecinos sienten de manera leve pero perceptible los temblores que provocan el tremor, es decir,la vibración del magma en su ascenso.