-¿Hay algún aspecto que diferencie a estas jornadas de traumatología con respecto a las 24 que la han precedido?

- Sí, que nos hemos centrado en el deporte, ya que este año coincide con la conmemoración del 80º aniversario de la Federación de Fútbol de Las Palmas de Gran Canaria y las 16 Jornadas Internacionales para Técnicos Deportivos. Las Jornadas de Traumatología se han desarrollado durante 25 años ininterrumpidamente, al fines del mes de octubre con la participación de todo el personal relacionado con el mundo rehabilitador.

- ¿Qué objetivo se persigue realmente en las ponencias?

- Sobre todo dar a conocer las lesiones deportivas, ya que hay lesiones ortopédicas y traumáticas. Todo esto se lleva a cabo por la Federación de Fútbol de Las Palmas de Gran Canaria, el Departamento de Ciencias Médicas y Quirúrgicas y la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, y con los doctores José Antonio Ruiz Caballero y Estrella Brito Ojeda.

- ¿Recomendaría su asistencia a algún sector profesional dentro del personal sanitario?

- A especialistas en traumatología, ATS y fisioterapeutas. A estudiantes de medicina y enfermería e incluso a los especialistas en Educación Física.

- ¿Qué tipo de ponentes ha escogido para intervenir?

- Hay ponentes del extranjero, nacionales y locales, para que los profesionales puedan llevar estos conocimientos a su respectivo lugar de trabajo y vamos a tocar lesiones traumáticas y ortopédicas. Son grandes profesionales que hablarán de todas las regiones del cuerpo humano en relación con las lesiones deportivas, ya sean craneales, torácicas, cardiacas, abdominales, de pelvis, de extremidades inferiores o superiores, etc., para que vean el diagnóstico y sepan seguir el tratamiento.

- Se van a presentar un total de 40 ponencias durante los dos días, pero ¿destacaría alguna intervención en especial?

- La de Ruano Gil sobre lesiones y vías de abordaje en la cadera, o la del catedrático de Fisiología del Deporte, Julio César Legido Alce, que interviene hoy, a las 12.00 horas, sobre las lesiones en el Siglo XXI.

- ¿Cree que, en general, los deportistas están bien informados sobre los tratamientos a seguir tras una lesión?

- Sí, pero al no ser traumatólogos es complejo que sepan si una lesión de tobillo puede ser quirúrgica u ortopédica, o que haya o no haya que operarla. Hay que conocer las patologías para acudir a uno u otro profesional, que sepan que con las lesiones torácicas hay que ir al cardiólogo o neumólogo, las digestivas al cirujano, las traumatológicas al cirujano ortopédico, las craneales al neurocirujano y las nasales al otorrino.

- ¿Qué lesiones suelen ser más frecuentes entre los deportistas profesionales?

- Los esguinces, fracturas y luxaciones. Pero depende mucho de cada deporte. En el baloncesto afecta principalmente a los tobillos o a las manos, mientras que en el fútbol a los ligamentos de la rodilla. Igual que en el lanzamiento de jabalina o en la natación es a los hombros.

- ¿Hay un deporte que tenga el mayor índice de lesiones?

- El fútbol, ya que, por las caídas, las lesiones afectan a las extremidades, la columna, etc., pero gracias a las nuevas técnicas de entrenamiento el deportista está mejor preparado y sabe caer de forma adecuada para evitarlas. Son necesarias unas buenas tablas para un precalentamiento y que la musculatura se ponga a tono para ese deporte.

- ¿Ha habido últimamente algún avance significativo sobre los modos de tratamiento?

- Ha habido un avance muy importante en una patología llamada síndrome fémoroacetabular, que se produce en la cadera en jóvenes y que puede producir alteraciones en la circulación. Ahora, con la resonancia magnética, ya la podemos detectar.

- ¿Se va a abordar alguna cuestión sobre la práctica del deporte en la tercera edad?

- Sí, y también se va a tocar ese tema. La tercera edad ya practica mucho deporte, y tenemos un tema específico sobre las lesiones en estos pacientes. Hemos incluido unas recomendaciones sobre qué deportes les convienen a través de especialistas, ya que la actividad física es muy importante en la prevención de la osteoporosis y para que la persona de edad pueda evitar futuras fracturas.