"Empeñados en no comer terminamos por engordar"

- Es una dieta proteinada controlada, que se usa en EE UU desde hace 35 años; más de 100.000 personas recurren a ella actualmente en España. Se trata de ir deprisa a la hora de adelgazar. Con este procedimiento, un hombre joven puede adelgazar 12 kilos en un mes y una mujer, de seis a ocho kilos. Es, además, una terapia que ha demostrado resultados eficaces en los procesos de adelgazamiento médico para casos en los que se supera en 10 kilos el peso normal. Estos requieren un seguimiento personalizado por parte de un especialista.

- ¿Es entonces un tratamiento, más que una dieta?

- Puede utilizarla el que quiera. Eso sí, las enfermedades derivadas de una mala alimentación afectan gravemente a la calidad de vida. Está demostrado que un día para una persona normal es un día y medio para los que sufren estos trastornos, que les producen dolores en las piernas o les afecta al corazón. La dieta te sanea a la vez que te pone fuerte, cuando ves los resultados.

- ¿Qué técnica sigue la dieta?

- La dieta conlleva cinco fases. Primero se recetan productos proteinados, que se obtienen con receta en farmacia y se introducen verduras. En la segunda fase se introduce la carne y el pescado, y en la siguiente la fruta y los productos lácteos. Al final, podemos meter el bocadillo de media mañana. El especialista evita el efecto rebote, por el que se mantienen los malos hábitos. Se nos escapa que, empeñados en no comer, terminamos por engordar. Lo ideal es comer cinco veces al día, pero moderadamente y sin ansiedad.

- ¿En qué mejora a otras dietas?

- Es tan o más rápida que los regímenes milagrosos y las dietas de autor, y sus resultados están demostrados. Otras dietas son como el automedicarse, pues no especifican el procedimiento y dejan abierta la interpretación. Con la dieta flash se lleva un control que fideliza el tratamiento y se educan los hábitos.

- ¿Cuánto dinero se puede llegar a invertir en esta dieta?

- En las fases más estrictas, son tres semanas a base de proteinados, y ahí te gastas unos 50 euros semanales. Después de este periodo la dieta se normaliza y los gastos se reducen.

- ¿Es viable su implementación en la sanidad pública?

- Nadie se ha planteado todavía que la Seguridad Social aplique esta terapia en España, quizás por cuestiones presupuestarias. Sería lógico con casos como el de una mujer de 41 años que perdió 46 kilos en 10 meses. En Francia, la sanidad pública cubre estos tratamientos.